Por: José Miguel Castro Bascuñan. Médico Veterinario. Candidato a Diputado por el Distrito 3
En mis recorridos por la región, cada vez es más recurrente el tema de la migración, en donde se amalgama la delincuencia y falta de oportunidades, la pobreza a los campamentos. La falta de organización y de control legislativo, tristemente a un sueño americano no cumplido.
Si bien durante el gobierno del Presidente Piñera se trabajó en un proyecto que renovaba completamente la legislación migratoria nacional, este fue descartado por tener, a juicio de la nueva administración, una perspectiva economicista del fenómeno, pensada en la administración de los flujos migratorios en aras del interés nacional. A la fecha, no hay proyecto presentado y difícilmente un proyecto de esta magnitud podrá tramitarse enteramente en lo que queda de este gobierno.
Valoro y apoyo el proyecto presentado por un grupo transversal de diputados el que conjuntamente con abrir el debate, trata dos temas que resultan fundamentales: el primero, relativo dotar al país de un marco general sobre la integración de los migrantes; y el segundo, un conjunto de medidas orientadas a lograr una migración segura, concepto que creo fundamental para articular las migraciones coordinadamente con el Derecho nacional e internacional.
Así, el proyecto tiene dos ejes: el primero, relativo a la inclusión, estableciendo obligaciones para el Estado y las municipalidades en orden a fomentar efectivamente la participación de los migrantes en los derechos y obligaciones que formar parte de la comunidad nacional impone; por otro lado, para lograr promover la migración segura, se establecen nuevos requisitos para algunas visaciones y se restringe la posibilidad de modificar el estatus migratorio, bajo la premisa de que es indispensable la actuación de buena fe para integrarse a la comunidad.
Esta iniciativa fortalece nuestro país, y coloca a todas las autoridades en la labor de salvaguardar el respeto recíproco, dada la realidad de Antofagasta es urgente avanzar en esta discusión, necesitamos voluntad política y más compromiso con el norte de parte de este gobierno, lo que nos permitirá mejorar nuestra relación con los migrantes. Nuestra diversidad es nuestra riqueza y debemos fomentarla para tener un mejor país y por supuesto una mejor región.
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