Ideas de emprendimientos rondaban siempre su cabeza. Pasó desde la venta de almendras en el colegio, hasta un invernadero de caracoles en la universidad. Intentó con un sex shop online y luego aseo industrial. Éxitos y fracasos lo llevaron a seguir explorando rubros, hasta el día en que sin planearlo mucho, un video en redes sociales encendió su creatividad: publicidad a pedales. Ignacio Ortega Valenzuela es el hombre detrás de la innovadora idea de la publicidad verde en Rancagua
Para conocer más sobre esta ingeniosa forma de publicidad, conversamos con Ignacio Ortega, Gerente General de Naturalmente Vital, un emprendimiento que tiene todos los ingredientes para llamar la atención, bicicletas de antaño, estilo único y una propuesta ecológica y sustentable.
Sobre una estilosa bicicleta restaurada de los años 60, Ignacio se mueve por la ciudad, atrae las miradas, no sólo por el talante de su pedaleo, sino porque lo acompaña una estructura móvil que transmite su directo mensaje: “tu marca podría estar aquí”.
Sustentabilidad como valor agregado
Las bicicletas son cuidadosamente elegidas, no son compras a la ligera. Ignacio Ortega se preocupa de buscar esas que duermen en algún cuarto de casa antigua, las que están tiradas en el techo o que la gente prefiere botar. Esas son el alma de su emprendimiento, que tiene además factores clave de producción. Un restaurador de Graneros es el encargado de darles nueva vida a las viejas chatarras y convertirlas en joyas de exhibición. “Así -dice Ignacio- se reduce la huella de carbono, reutiliza lo que otros ven como basura y genera redes de trabajo en torno a un producto sustentable”.
Pero, ¿Qué es Naturalmente Vital?
“Es una empresa de publicidad verde, sobre ruedas, no contaminante y con onda. Mi idea nace desde la contaminación visual que experimentamos al salir a la calle, es decir, en cualquier esquina, en cualquier edificio, en cualquier centro comercial, vemos publicidad invasiva en forma de pantallas, carteles, papelones, etc. Cansado de eso, pensé en idear una forma distinta de transmitir el mensaje y así nació Naturalmente Vital: publicidad sobre bicicletas”.
¿Cómo nace la idea de hacer publicidad en bicicletas?
“Fue un poco por azar, porque yo usaba una bicicleta Trek. Siempre me muevo en bicicleta, pero la que tenía era muy de montaña, muy deportiva y sentía que necesitaba algo que tuviera otro estilo. Así que pensé en buscar una bicicleta antigua en el mercado, pero ninguna cumplió mi expectativa. Finalmente compré una antigua y la empecé a restaurar yo mismo. Ahí me acordé de un video que había visto en Facebook de una empresa en Alemania que hacia publicidad itinerante en bicicletas, y se me prendió la ampolleta”.
“Pero quería ir más allá, no solamente la idea de hacer publicidad en bicicletas me parecía genial, sino que además quería darle un plus, un sello diferenciador. Y pensé… si restauré esta bicicleta antigua para mí, ¿por qué no hago lo mismo con otras y genero un estilo de publicidad vintage? Y así fui armando un cuento, hasta que llegué a desarrollar el concepto de publicidad ecológica y sustentable”.
¿Cómo empezaste a generar la idea de publicidad sustentable?
“Soy muy consciente de que hay que cuidar el planeta, por eso mismo comencé a moverme en bici hace muchos años y de alguna forma aportar a este escenario tan terrible del cambio climático. Por otro lado, siempre quise desarrollar un negocio que me gustara, probé distintos rubros, pasé por un negocio de venta de caracoles, compra venta de juguetes navideños, frutos secos, aseos industrial, hasta un sex shop hice y no lograba enamorarme de mi empresa. Hasta que un día, luego de restaurar mi propia bicicleta y viendo todo el escenario agobiante de publicidad en la calle, se me ocurrió esto de armar una estructura que fuera trasladada por la bicicleta y transmitiera un mensaje. Simple, pero innovador, porque en Rancagua no existe nada similar. Entonces pensé en probarla yo, algo así como un ratón de laboratorio y salir a la calle con mi bicicleta y un pendón móvil a ver qué sucedía”.
¿Cómo fue la reacción de la gente?
“¡Impresionante! Me miraban, me aplaudían, en los semáforos me tocaban la bocina y me gritaban “¡buena!”, entonces ahí me di cuenta de que podía funcionar. Además lo que más me seduce de esta iniciativa es que no contamina, no invade como la publicidad de carteles o pantallas y ofrece además un atractivo visual de bicicletas de los 60, 70 restauradas y en perfectas condiciones. Mi visión es hacer además de una publicidad ecológica, un museo de bicicletas que adornen la ciudad”.
¿Cómo funciona Naturalmente Vital?
“Las bicicletas recorren las calles y ciclovías de Rancagua en pequeñas caravanas de tres a cinco promotores. Además quienes suben a la bicicleta están completamente preparados para resolver dudas respecto de la marca anunciada. Es decir, no sólo conducen la bicicleta, sino que además son promotores de la marca y vendedores nuestros”.
“Además, creemos que el calentamiento global hay que pararlo. Nosotros nos adueñamos de un ADN y nos enfocamos en producir nuestros servicios bajo cero emisiones de CO2. Además de movernos con energía vital del pedaleo, incluimos placas fotovoltaicas a las bicicletas, es decir, contarán con una producción de energía solar, aprovechando al máximo los recursos”.
¿Habrá alguna restricción a las marcas que quieran anunciar con ustedes?
“Ninguna, nosotros tenemos las puertas abiertas a todas las empresas. Sin embargo, si queremos comenzar a generar el cambio en ellos también. Y asesorarlos en generar en un inicio, publicidad sustentable y ecológica, pero también crear nuevos hábitos amigables con el medio ambiente. No sólo buscamos ser líderes en el área publicitaria, sino contribuir también a generar consciencia sobre el cambio climático y qué mejor que nuestra propia forma de trabajar sea un eco de esa filosofía”.
¿Apuntas a generar un cambio en el modelo de anuncios?
“Apuntamos primero a ser una alternativa especialmente para las pymes. Sabemos que la publicidad es un ítem costoso y queremos aportar a la visibilidad de iniciativas que son súper innovadoras, creativas y entretenidas, pero que no tienen la capacidad de contratar grandes servicios de publicidad. Esta es una opción viable para ellos, pero no sólo queremos quedarnos ahí, también apostamos a que las grandes marcas, los grandes centros comerciales, den el ejemplo y logren alinearse ante esta verdadera revolución ecológica que estamos viviendo. Esa es la invitación que hacemos”.
¿Cómo recorrerán las calles las bicicletas de Naturalmente Vital?
“Nuestro modelo plantea un uso inteligente de todos los recursos, por tanto, no queremos que nuestros promotores den vueltas todo el día, sería agotador y poco efectivo. A raíz de eso diseñamos una estrategia de recorrido en horas punta, dos horas en la mañana y dos horas en la tarde. Cuando existe mayor flujo de conductores y peatones, las marcas recorrerán la ciudad por los 54 kilómetros de ciclo vías con las que cuenta Rancagua, sin interferir el tráfico y mostrando el mensaje que el cliente necesita levantar”.
A sólo dos meses de restaurar su primera bicicleta, Ignacio Ortega, el pionero de la publicidad verde ya tiene un staff de promotores, ocho bicicletas equipadas y todo listo para pedalear por las ciclovías de Rancagua.
