Por: Carlos Ramírez L. Presidente Cámara Chilena de la Construcción Calama
Hace dos semanas, como Cámara Chilena de la Construcción, dimos a conocer el Informe de Calidad Vida Urbana –ICVU- elaborado por Núcleo de Estudios Metropolitanos del Instituto de Estudios Urbanos y Territoriales de la Pontificia Universidad Católica y la CChC, estudio que sitúa a Calama en el lugar número 29 de 93 ciudades.
Este informe basa su estudio en seis dimensiones: condiciones laborales, ambiente de negocios, condiciones socioculturales, conectividad y movilidad, salud y medio ambiente y finalmente vivienda y entorno. Estos resultados arrojaron que nuestra ciudad se sitúe en el lugar 29 por sobre Antofagasta, Arica y bajo Iquique.
Como novedad de este año, el informe de Calidad Vida Urbana procedió a ordenar las comunas consideradas en el estudio según su gasto municipal total por habitante. Lo anterior, permitió observar que existen comunas que han podido lograr un ranking de rango superior, pese a tener presupuestos relativamente menores. En este contexto se destacan ciudades como Machalí, Coyhaique, San Miguel y Valdivia, entre otros, cuyo presupuesto es menor a $ 200.000 por habitante, pero que claramente reflejan una gestión eficiente en relación a su desarrollo urbano.
Nuestra ciudad, con un presupuesto levemente mayor al mencionado, tiene en estos ejemplos una gran inspiración para enfocarse en hacer las cosas de mejor manera y considerar que el presupuesto no es la única variable que influye en el crecimiento de una ciudad sino también la gestión y focalización en los temas claves que afectan el bienestar de sus habitantes.
Con toda esta información sobre la mesa, el desafío para lograr un desarrollo sustentable en Calama sigue estando más presente que nunca. Esta línea de trabajo es la que entiende y sigue la Cámara Chile de Construcción que, a través de la generación de espacios de trabajo y aportes técnicos como este, contribuye al desarrollo urbano de la capital loina.
Por último, si le sumamos una participación activa de la comunidad, de los gremios y organizaciones del ámbito público y privado, podremos llevar adelante los proyectos fundamentales que permitan el crecimiento armónico de nuestra ciudad, de manera de consolidar sus fortalezas y disminuir sus debilidades.
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