El parlamentario socialista, aseveró, que “si se rechaza interrumpir el embarazo, no puede haber convenio de dineros del Estado que vayan a esas universidades o esas instituciones confesionales, porque si se niegan a dar esa prestación, es obvio que no pueden recibir financiamiento estatal cuando el Estado ya aprobó la Ley de Interrupción del Embarazo”
Luego que el Ministerio de Salud volviera a retirar el protocolo por objeción de conciencia institucional ingresado en junio último, tras nuevas observaciones realizadas por la Contraloría General de la República, el parlamentario por O´Higgins y presidente de la Comisión de Salud de la Cámara, Juan Luis Castro, emplazó a las autoridades para solucionar la problemática.
“Esto parece un cuento de nunca acabar”, hay “miles de mujeres con la esperanza en una ley aprobada hace un año”, pero el “reglamento fue borrado con el codo de la propia autoridad en marzo pasado, con un nuevo reglamento en junio que hasta el día de hoy no tiene aprobación, se está burlando la voluntad de la gente y de las mujeres que quieren optar con ley vigente desde hace un año a un aborto en tres causales”, dijo el diputado socialista.
Como presidente de la Comisión de Salud de la Cámara, expresó que “es inaceptable desde todo punto de vista, explicaciones más o explicaciones menos. Uno piensa que hay un verdadero obstruccionismo, una forma de burlar la ley a partir de la no aplicación de un reglamento, que es la llave maestra para que sea operativa la posibilidad de que por tres causas distintas, una mujer aborte en nuestro país por su propia voluntad”.
Por otra parte, Juan Luis Castro, dijo que “si se rechaza interrumpir el embarazo, no puede haber convenio de dineros del Estado que vayan a esas universidades o esas instituciones confesionales, porque si se niegan a dar esa prestación, es obvio que no pueden recibir financiamiento estatal cuando el Estado ya aprobó la Ley de Interrupción del Embarazo”, no puede haber como se dice en buen chileno “chicha y chancho”, resaltó el Diputado.
“Llamo al presidente Piñera a que deje de lado un discurso liberal, pero a la vez una práctica conservadora, que es negarle a las mujeres por la vía de un reglamento, la posibilidad de acceder a lo que toda la ciudadanía, con mucho esfuerzo y después de años, se logró finalmente conquistar para que Chile tenga el derecho ciudadano a una interrupción libre del embarazo cuando hay motivos fundados”.
Finalmente el Legislador (PS) por la región de O’Higgins, sostuvo que “nunca un hospital público debe negarse a atender a una mujer que pida la interrupción del embarazo bajo el argumento de que la objeción institucional o de las estructuras pueda ser válido ahí, pero también, debe dejar claramente establecido que en las clínicas privadas nunca una objeción de conciencia va a permitir que haya otras prestaciones; como los partos, las cesáreas, los papanicolaou, que se mantengan en convenio con esas instituciones privadas, mientras se rechaza el aborto”.
