Por: José Nain P. Dirigente Mapuche y Concejal de la comuna de Galvarino
En día sábado 17 de noviembre de 2018, en la Comunidad Mapuche de Temu cui cui, Comuna de Ercilla, se realizaron los funerales del Peñi Weichefe, Camilo Catrillanca, asesinado a mano del comando Militar denominado JUNGLA, hecho ocurrido el día miércoles 14 de noviembre, cuando un número indeterminado de comandos armados irrumpieron al interior de la comunidad, disparando por la espalda a Camilo Catrillanca, con armas de fuego de alto calibre.
La ceremonia tradicional mapuche comenzó muy temprano con la presencia de Autoridades Tradicionales, Lonkos, Machis, Werkenes, quienes realzaron la ceremonia fúnebre ajustada a los protocolos mapuches en Mapudungun elevando una oración a la ñuke mapu y al wenu mapu para que el espíritu de Camilo descanse en paz y desde el lugar donde permanezca ahora junto a Lautaro, Caupolican, Guacolda, Magñil Wenu y muchos más, para que nos sigan dando la fuerza para seguir luchando por la libertad de nuestro pueblo.
Al lugar de la ceremonia llegaron delegaciones mapuches de todo el Meli Witran Mapu, los cuatro puntos cardinales del wallmapu, para expresar sus condolencias a la familia y la comunidad, pero al mismo lugar llegamos para reafirmar nuestro compromiso con la lucha por la restitución del territorio mapuche y alcanzar el derecho a la Libre determinación.
Debemos manifestar con mucha preocupación, que en la medida que transcurre el tiempo, las versiones oficiales del gobierno en torno a este caso han ido variando. ¿Por qué? primero se dijo que, Camilo Catrillanca, había participado del robo de vehículos y que tenía antecedentes policiales, en consecuencia que todo era Falso. Él estaba trabajando en un predio agrícola de su comunidad con un tractor, sin embargo, todo cambio, al momento de llegar la policía quienes le dispararon, no para reducirlo sino para acribillarlo inmediatamente, también destacar que Camilo no tiene antecedentes penales de ningún tipo, como lo afirmo Luis Mayol Intendente de la Araucanía, lo cual se derrumbó rápidamente y quedó claro que solo era un montaje del gobierno para ocultar el asesinato de nuestro Peñi.
El Gobierno dijo que el comando JUNGLA, había sido atacado con armas de grueso calibre, sin embargo, no hay tal evidencia, no han mostrado las pruebas suficientes, lo que viene a confirmar nuestra sospecha y desconfianza de un burdo montaje de este comando militar para justificar el crimen.
A un día del funeral de Camilo Catrillanca, sale el Ministro del Interior a informar al país que este grupo militar que participó del asesinato, borro las imágenes de las cámaras que utilizan en los operativos, destruyeron la memoria, por tanto, hoy estamos frente a un gran montaje al puro estilo “Operación Huracán”, bajando el perfil del crimen.
De sus declaraciones se desprende el odio y homofobia hacia el Pueblo Mapuche, porque en ningún caso hace un mea culpa de sus actos. Solo se anuncia que darán de baja a los cuatro uniformados que participaron de la muerte de Camilo y destituirán a los generales a cargo del comando JUNGLA, sin decir una palabra de los responsables políticos de esta acción encubierta contra el Pueblo Mapuche.
Nuestro Pueblo Mapuche pide que, no solo se expulse de carabineros a los funcionarios involucrados directamente en el crimen, sino también, al alto mando de la institución, quienes entregaron la orden de matar según la jerarquía militar… pero también del ministro del interior, Andrés Chadwich y el intendente regional, Luis Mayol, quienes desde el principio entregaron información falsa a la opinión pública, pretendiendo engañar a todo un país y al mundo.
El Gobierno de Piñera, deberá pedir perdón al Pueblo Mapuche, por sus desaciertos políticos, su autoritarismo institucional que nos pretende imponer si consulta alguna, violando sistemáticamente los instrumentos de derechos humanos que en chile no reconocen.
La paz para este gobierno no es asunto de relevancia, la paz, no se conquista con más sangre mapuche, el territorio mapuche necesita urgente justicia social, restitución del territorio mapuche, ejercicio pleno de la libre determinación.
La militarización del territorio mapuche, es una clara provocación de parte del estado chileno y su gobierno de turno, por tanto, la retirada del comando JUNGLA, se convertiría en un gesto político importante y un acto de transparencia y seriedad que el gobierno no ha tenido con el Pueblo Mapuche.
Finalmente hacemos un llamado a las organizaciones sociales, de Derechos Humanos y de solidaridad nacional e internacional, que continúen denunciando, en todos los niveles que corresponda al gobierno Piñera, a fin de desenmascarar y mostrar el verdadero rostro del opresor, dejando en evidencia la sistemática violación de los Derechos Humanos Mapuches y la impunidad de los crímenes que se han cometido por parte del Estado Chileno, en contra de la Nación Mapuche, en donde la Clase Política chilena ha sido cómplice aceptando una política de exterminio, social, cultural y territorial propiciada por los distintos gobiernos de turno que estos actores representan.
El contenido expresado en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor y no representa necesariamente la visión ni línea editorial de Poder y Liderazgo.