En la Región de O’Higgins, específicamente en la comuna de Requínoa, se ubica desde hace 27 años, Minera Valle Central, una empresa líder en el procesamiento de relaves, que nació al alero de un proyecto licitado por División El Teniente de Codelco Chile. Para hablar de los inicios, pero también del trabajo que los ha llevado a ser uno de los principales expositores en Exponor 2019, conversó Poder y Liderazgo con Christian Cáceres Meneses, Gerente General de Minera Valle Central (MVC)
“Fueron 8 empresarios chilenos que le dieron vida a Minera Valle Central, siendo una idea 100% chilena, donde los inversionistas se adjudicaron la licitación para recuperar cobre y molibdeno desde los relaves frescos de la División El Teniente, a través del canal de relaves hacia el Embalse Carén”, pero a poco de avanzar el proyecto, MVC fue tomando vida propia, siguiendo en su primera etapa con un proceso orientado al tratamiento de la fracción fina de los relaves, con una planta de flotación de cascadas que originaba un concentrado de baja ley, pero apto para ser tratado en una planta de flotación convencional.
“Partimos con producciones del orden de 200 a 250 toneladas al mes, en los mejores meses, y a poco andar la empresa se fue dando cuenta que el proceso se podía ir mejorando, incorporando un programa de expansión para incorporar la recuperación del cobre contenido en la fracción gruesa”.
“Ya en 1996, se hizo este plan de expansión, ampliándose la planta para el tratamiento de las arenas gruesas y ahí hubo un cambio importante, pues la producción subió al triple y llegamos a 1.600 toneladas más o menos mensual, pero siempre con la intención de crecer”.
Pero antes de ello, MVC tuvo su momento crítico. “Cuando se vino la crisis asiática deciden vender y el año 2013 se gestó esta venta, entrando en el escenario la empresa canadiense Amerigo Resources Ltda., que son los dueños actuales, siendo una junior canadiense que tiene sede en Vancouver, con presencia en la bolsa de Toronto”.
Lo cierto es que la canadiense dio inicio a un nuevo plan de expansión y consolidó a la empresa, duplicando la capacidad de tratamiento con la expansión de la planta de molienda. “Al llegar dijeron que todo lo que se generaba acá lo iban a reinvertir, y así nace el convencimiento de nuestros socios, que en este caso era El Teniente, de que tratemos los relaves antiguos que están depositados en el Tranque Colihues y Cauquenes, pues tienen mejores leyes (…) De esta forma llegaron los contratos de largo plazo. Los relaves frescos tienen leyes de 01% y los relaves antiguos de 03%. Entonces con esta expansión llegamos a firmar un contrato de largo plazo, ampliándose la planta y hoy día estamos tratando 60.000 toneladas de relave antiguo y el 100% de los relaves frescos”.
Esta minera, que transforma pasivos ambientales en activos económicos y sociales, sin duda que está comprometida con el desarrollo del país, y eso muy bien lo sabe Christian Cáceres, quien destaca que en el 2014, MVC firma contrato con Codelco para procesar los relaves depositados en el Tranque Cauquenes. Este proyecto estructural permitirá duplicar la producción de la empresa y operar con un contrato de largo con la cuprífera hasta el año 2037, destacándose entre sus grandes hitos, que el año pasado inauguró la ampliación de su planta de beneficio para el procesamiento de los relaves finos del Tranque Cauquenes. Con esta expansión, MVC pasará a producir 600.000 toneladas de cobre adicionales y 36 millones de libras de molibdeno, entre los años 2019 y 2037, posicionándose como una de las firmas más competitivas de la mediana minería chilena.
¿La relación comercial cómo es?
“Es un modelo de negocio de maquila donde las inversiones las hacemos nosotros, la ingeniería la hacemos nosotros, toda la producción que hoy día produce Valle Central, desde los relaves, es propiedad de El Teniente. Ellos la recursan como propia y nos pagan un delta que tiene relación con lo que se produce, en el sentido de mayor producción, y también está linqueado, relacionado al precio del cobre. Por lo tanto, en la medida que el precio baja nosotros también vamos en el riesgo”.
Ahora del relave en sí, ¿el producto es cobre o hay algo más?
“Del relave, tomamos el 01% del relave fresco y casi 03 del antiguo y entra a molienda y flotación y tenemos concentrado de cobre con leyes de 28% en cobre aproximadamente, y, adicionalmente, producimos concentrados de molibdeno comerciales del 44%. Y ese producto si es nuestro y nosotros le pagamos a Codelco un valor por ese producto, pero el cobre es todo de ellos”.
La relación en el tiempo ha implicado asumir un liderazgo dentro de la industria nacional, que no es fácil ya que el relave es visto como lo que nadie quiere cerca, pero ahí hay un concepto de comercio circular muy interesante…
“Sin duda, todos tienen claro que el relave es el desecho, hay depósitos de relave en Chile muy antiguos, las mineras generan, diariamente, más de un millón de toneladas de relaves y nosotros somos los únicos que tratamos relaves a esta escala”.
Pero también gracias a este trabajo, “producimos el año pasado 30 mil toneladas de cobre y cerca de 2 millones de libras de molibdeno”.
“Cada relave, cada lugar es inédito, pero hay lugares donde sí pueden ser rentables y generan valor. La economía circular donde trabajan 300 personas en forma permanente, más un contratista, ahí nuestro alcance, en cuanto a las familias es del orden de mil personas, que en su mayoría, más del 95%, corresponden a la Región de O’Higgins”.
Y todo a partir de un desecho…
“Esa es la virtud… que el desecho genere riqueza es una virtud, pues crea mejoras a las comunidades, y adicionalmente, nosotros vemos muy relevante que además podemos generar recursos para hacer un saneamiento de muchos tranques de relaves que hoy día, incluso, están abandonados”.
“Si cada relave antiguo se procesa, se recuperan los elementos de interés que van a generar recursos, se ayuda a las comunidades y además se les paga planes de cierre o tranques que están en la cordillera, precordillera, muchos de ellos fueron construidos cuando la normativa era muy distinta, esas posibilidades de bajarlos o reubicarlos en un lugar más seguro genera riqueza. Hay un círculo virtuoso”.
¿Y qué pasa con la competencia o los nuevos socios?
“Nosotros, más que nombrar al compañero, vemos lo nuestro y por eso estamos acá hoy día, en Exponor 2019, porque creemos que tenemos una experiencia suficiente para ser un actor en el tema del tratamiento de relaves; queremos contar nuestra experiencia y queremos hacer negocios, obviamente. Dentro de esta economía circular, queremos ser parte”.
“Podemos generar recursos, podemos mejorar y nosotros creemos que tenemos hoy en día la experiencia suficiente para ir a cualquier lado a hacerlo”.
“He planteado como el foco de mi gestión el buscar un socio, yo llamo un socio a quien tenga un relave y que generemos un negocio, probablemente no todos los modelos de negocio sean como el que tenemos hoy día, pero mi intención es buscar nuevas fuentes de relaves, en un proceso que permita ayudar al medioambiente, a la economía circular de las comunidades, a mejorar la seguridad de los tranques. Creemos que eso se puede hacer, ese es el desafío”.
Al inicio de Exponor, un grupo de manifestantes de la agrupación Atacama Somos Todos se hicieron presentes para mostrar su molestia por el litio, con el mensaje “No seremos más zona de sacrificio”. Ello reafirma que no es fácil vivir al lado de un relave o una fundición.
“El impacto y trabajo que se realiza con las comunidades es un temazo. En Minera Valle Central lo sabemos y creemos que lo que nosotros hacemos en favor de las comunidades marca una diferencia para el desarrollo de ellos”.
“Debemos valorar que hay muchos lugares donde podemos mejorar las condiciones, porque nuestra minera como también otras, generamos empleo, se genera una relación con las comunidades, se generan recursos; cobre, molibdeno o lo que sea para el país”.
Antes de terminar, ¿qué los hace diferentes?… Además del valor compartido que MVC entrega en la comunidad donde está inserta la empresa.
“Que nuestro trabajo tiene mucho de innovación, la tecnología que nosotros usamos, en términos generales, es básicamente la misma que usan los concentradores tradicionales, lo que pasa es que nosotros nos hemos especializado en ir a buscar el cobre donde otros, en algún momento, no lo pudieron hacer. Nos hemos especializado”.
Con un mensaje claro y franco, Christian Cáceres es un convencido que Minera Valle Central es un aporte al medioambiente y a la comunidad donde esté presente, porque “las comunidades van creciendo, y ahí se ve como el tema medioambiental es fundamental y el que no se preocupa de ello… está fuera, eso es claro. Si una empresa minera cree que las comunidades no son lo principal, se va a quedar atrás”. Ese es parte del mensaje que la empresa llevó hasta la XVIII versión de Exponor, donde las diversas mineras pudieron conocer como se transforman pasivos ambientales en activos económicos y sociales,