Por: Carlos Segura. CMO Ecomsur Latinoamérica
El Ecommerce también es una herramienta que tiene como utilidad perfilar a los consumidores. Según un estudio de Statista, durante 2021 un 26% de los chilenos compró al menos una vez a la semana por internet, ya sea por un computador o desde dispositivos móviles. Esto es un aumento considerable si se compara con la cifra del 2020, donde sólo 17% de las personas adquirió productos online con esa frecuencia.
Este dato no sólo muestra el proceso de adopción paulatino que representan las ventas online y la trascendencia de incorporar la omnicanalidad en los negocios, sino que nos da pequeñas pistas sobre cómo llega el consumidor digital a la era “post-pandemia”.
¿A qué nos referimos? Imaginemos qué hacen el 25% de los compradores buscando un producto en internet, cuando sólo una pequeña fracción de ellos finalizará la transacción por esta vía.
¿Se está informando? ¿Está comparando precios? ¿Busca marcas con las que se siente identificado? ¿Analiza las publicaciones de esas marcas en redes sociales? ¿Se está sintiendo identificado con el influencer elegido por su marca? ¿Está buscando opciones y facilidades de pago en diferentes centros de venta (en el marketplace, tienda departamental o tienda física de la marca)? Todas las respuestas podrían ser un sí.
Actualmente el consumidor digital evolucionó, sobre todo, porque sus experiencias de vida implican ser híbrido entre lo físico y digital en todo momento: al trabajar, al entretenerse, al hacer ejercicio, al tomar clases y, claro, al comprar. Por eso no sorprende que la mayoría de los compradores tengan interacción con canales digitales antes de realizar una compra, aunque ésta se termine concretando en un comercio físico. Lo que sí sorprende, es que algunas marcas todavía no lo asimilen.
A partir de este análisis del perfil del consumidor digital, tenemos que darle un nuevo valor a lo que significan, al menos, tres aspectos de los que todos están hablando: el contenido, el marketing de influencers y la integración de la marca en las tendencias que le impactan.
Respecto al contenido, las marcas que logren acciones que contengan valor con una estrategia de marketing integral, tendrán mayores posibilidades de enganchar con todos los compradores que lleguen a su sitio.
En cuanto al marketing de influencers, podemos intuir que el público está entendiendo mejor la responsabilidad de estos, en donde no basta tener 2 millones de seguidores para convertirse en una figura de recomendación, sino que generar contenido de calidad y permanente en el tiempo.
La sostenibilidad, vida saludable, fitness, salud mental, experiencia sobre consumo, socialización digital, entre otras, son temas que están siendo cada vez más populares. Las marcas deben asimilar aquellas tendencias que le lleven a conectar con nuevos públicos, si lo que pretenden es mantener una base de clientes en crecimiento.
En todos estos rubros, el marketing digital jugará un papel crucial para lograr conectar con las audiencias. Preparémonos para el consumidor digital más retador, exigente e informado que hemos conocido.
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