Por: Alejandra Winter. Directora de CIC Connect
¿Cuáles son los factores determinantes para elegir un mercado donde emprender? ¿Qué aspectos deben tener en cuenta las startups que buscan expandir su modelo de negocio en el extranjero? Si tuviéramos que definir las claves, el acceso a financiamiento, las características de los consumidores, la infraestructura de ecosistemas y redes de contacto estarían en los primeros lugares de la lista.
Hay varias ciudades en el mundo que cumplen con estos requisitos y otras que están emergiendo cada vez con más fuerza. Esas son las conclusiones del “Global Startup Ecosystem Report 2024”, reporte elaborado por Startup Genome que en su 12° edición, ofrece información sobre los principales ecosistemas de creación de empresas del mundo, las tendencias emergentes y los principales retos a los que se enfrentan los emprendedores.
El ranking es encabezado por Silicon Valley, Londres, Nueva York, Tel Aviv y Los Ángeles, reafirmando la posición de liderazgo que tiene Estados Unidos a la hora de atraer a los emprendedores de todo el mundo gracias a su entorno robusto e híper conectado. Incluso Miami registró un notable progreso, posicionándose en el lugar 16° de los Top 20, con un aumento de siete posiciones en comparación al año anterior, lo que se explica por su sólida oferta de programas de Soft Landing.
Además, Miami, durante mucho tiempo ha sido un imán para las empresas emergentes latinoamericanas, estrechando lazos con Europa, Israel y otros países y tiene ambiciones de transformarse en uno de los ecosistemas de EEUU más conectados globalmente. Otros destinos a considerar en este país son Boston y Filadelfia.
Pero también surgen nuevos actores. Tokio, la capital de Japón, entró por primera vez al ranking Top 10 con gran presencia de inversionistas de capital de riesgo y un centro de investigación y desarrollo, junto al apoyo del gobierno y los gobiernos locales en estrategias como la Innovación Global de Tokio para apoyar el crecimiento de nuevas empresas.
En Latinoamérica, destacan Sao Paulo, Ciudad de México, Bogotá, Santiago y Río de Janeiro gracias a atributos como su ubicación estratégica, penetración tecnológica y diversidad; mientras que en Europa, París avanzó cuatro puestos, logrando el lugar 14°, seguida por Berlín en el 15°. Ciudades como Zurich (Suiza) y Munich (Alemania), Milán (Italia) Dublín (Irlanda), Rotterdam (Países Bajos), Madrid y Barcelona (España) también están emergiendo como alternativas cada vez más competitivas para las startups.
Es interesante analizar el caso de Europa, un continente compuesto por más de 450 millones de habitantes que viven en diferentes países, hablan distintos idiomas y poseen distintas culturas y normativas. Según el reporte, el 42% de los ecosistemas emergentes corresponde a ciudades europeas, con Londres, París, Berlín, Amsterdam y Estocolmo como referentes.
Entre los atractivos para las startups se pueden mencionar un entorno amigable para hacer negocios, el acceso a redes de partners estratégicos, el apoyo gubernamental y privado a los proyectos de innovación y un mercado ávido de acoger propuestas que aborden desafíos globales en el área de climatech, fintech, Inteligencia Artificial y Big data, entre otras.
Los últimos años han sido especialmente desafiantes para las startups debido a la contracción económica mundial y la disminución de los montos de inversión por parte de ventures capital y aceleradoras. Quienes emprenden y son fundadores deben enfocarse con mayor razón en ofrecer productos y servicios sólidos y con alto potencial de crecimiento tanto en mercados locales como internacionales.
La estrategia de expansión debe estar alineada con la búsqueda de oportunidades de crecimiento en ecosistemas amplios, dinámicos y seguros. Y aunque siempre es necesario analizar las startups caso a caso con la asesoría de expertos, el ranking de las ciudades más abiertas al emprendimiento puede ser una excelente guía para ayudar a tomar esta importante decisión.
El contenido expresado en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor y no representa necesariamente la visión ni línea editorial de Poder y Liderazgo
