Con tan sólo 32 años, Fernando San Román cuenta con una carrera en el servicio público que se la quisieran varios. Este ex alcalde de Tocopilla, hoy va tras un nuevo desafío personal y político, ser electo como diputado por el Distrito 3
Mientras a algunos los motiva el liderazgo, el amor por el servicio público, el compromiso con la sociedad, el trascender, el poder, las ambiciones personales, la presión de los partidos o muchos otros factores legítimos o no, a este ex alcalde de Tocopilla lo motiva “ser la voz y representar a quienes no son escuchados y no se les considera”, según el mismo señala.
Para conocer más sobre sus aspiraciones en su carrera al Congreso y su visión de lo que está pasando hoy en Chile, Poder y Liderazgo conversó en exclusiva con este tocopillano que ha dedicado su vida al servicio público y a las comunicaciones.
¿Qué espera lograr si llega a la Cámara de Diputados?
“Un avance para Antofagasta. Quiero que nuestra región sea más justa y que el crecimiento llegue a todos. Soy joven, tengo 32 años y quiero poner a disposición mi experiencia, pero también mi energía y motivación, para que colectivamente trabajemos en un plan de desarrollo para la región de Antofagasta”.
“Quiero representar los intereses de la región de Antofagasta y lograr que los recursos que aquí se generan beneficien a todos y no sólo a unos pocos, porque todavía tenemos muchos problemas sociales sin resolver, como la inseguridad, la falta de viviendas, la necesidad de mejorar la salud pública y la educación pública”.
¿Ayuda en la campaña el haber sido alcalde?
“El haber sido alcalde lo veo como un plus y una ventaja porque estos 4 años me entregaron la experiencia y conocimiento del sistema público. Sé cómo funciona el Estado, la burocracia, los tiempos, los énfasis, los intereses y las motivaciones. También me permitió conocer las problemáticas comunes de la región y los efectos del centralismo sobre las comunas del norte”.
¿Cómo evalúa la gestión parlamentaria de los actuales diputados por la zona?
“En general tengo una opinión crítica. Hay algunas propuestas interesantes, pero falta defender con más valentía y convicción los intereses de la región. Veo a los parlamentarios haciendo lo que les dicen desde sus partidos políticos y desde Santiago. Creo que los parlamentarios no están en la calle, no trabajan en terreno y están encerrados en una burbuja”.
A su juicio, ¿cuáles son las principales problemáticas de la región?
“El centralismo, el costo de la vida, la inseguridad, la falta de una salud pública digna, la falta de viviendas, la falta de participación en la toma de decisiones y la concentración del poder político y económico en pocas manos”.
La realidad de los habitantes de Tocopilla, Ollague, Calama o Antofagasta es distinta, ¿de qué forma pretende responder a esas demandas?
“Hay realidades similares que afectan a todos, como el centralismo de la capital, los problemas de inseguridad, falta de viviendas y la salud pública en crisis. Pero también hay particularidades en cada comuna, como la contaminación en algunas comunas como Tocopilla, Mejillones y Taltal, el aislamiento de ciudades más alejadas como Taltal y Ollagüe. Por ejemplo, la realidad de María Elena que es una comuna que pertenece a una empresa privada como SQM que abusa de su poder y coopta a sus habitantes. En Calama también hay problemas graves de contaminación, falta de viviendas y espacios públicos. Antofagasta también carece de viviendas sociales y espacios públicos, a lo que se suma la contaminación del puerto. Responder a estas demandas que son comunes en algunos casos y que en otros difieren, requiere en primer lugar de una presencia permanente en terreno, de escuchar a los vecinos y vecinas y de legislar para proponer soluciones viables a estas problemáticas. Por eso, en octubre lanzaremos nuestros compromisos con la Región de Antofagasta”.
¿Qué opinión le merece la situación que afecta a la Nueva Mayoría? Considerando que van con 2 candidatos presidenciales y/o sin un acuerdo parlamentario único.
“Esto demuestra que priman los intereses personales y partidistas antes que un proyecto común y colectivo que responda a las demandas sociales y que apunte a resolver las problemáticas que afectan a los chilenos y chilenas. Están más preocupados de mantener el poder y de cuidar sus puestos”.
Aunque sus raíces se acercan al Juntos Podemos y al Pro, hoy Fernando San Román está con el Frente Amplio, a través de Izquierda Libertaria, quienes lo proclamaron como su candidato a diputado, contando además con el apoyo del Partido Humanista y de Nueva Democracia.
¿Qué evaluación hace del trabajo desarrollado por el Frente Amplio a nivel regional como nacional?
“El Frente Amplio es un conglomerado nuevo, joven y en construcción. Hemos pasado por momentos complejos como la situación de Mayol en el distrito 10. Y si bien el problema se superó, es importante tener en cuenta que el Frente Amplio no es sólo lo que ocurre en Santiago. El Frente Amplio está avanzando en todo Chile, desde Arica a Magallanes. En la Región de Antofagasta hemos tenido importantes logros, como la votación de las primarias donde más de 7.000 ciudadanos dieron su apoyo a nuestros candidatos presidenciales, a lo que se suma el despliegue que estamos realizando en diferentes comunas y barrios de la región. Aquí hemos trabajado en conjunto y fraternalmente entre todos los partidos y organizaciones, logrando llevar una lista de parlamentarios y cores con total acuerdo. Pero depende de todos y todas, el camino que siga el Frente Amplio. Depende de nuestras convicciones y nuestro trabajo en terreno”.
Existen 5 cupos, para un total de 40 aspirantes para representar a la región en la Cámara de Diputados. ¿Quién o quiénes son los candidatos a vencer?
“Nosotros tenemos la convicción de que llegaremos al parlamento con la confianza y el apoyo de los habitantes de la región de Antofagasta. Pero no pecaremos de soberbia y no nos vamos a confiar. Lo que estamos haciendo es trabajar duramente, todos los días en terreno, haciendo mucho puerta a puerta, diálogos y reuniones, mirando a los ojos a nuestros vecinos y vecinas para escucharles y también transmitirles nuestras ideas. Creemos que el Frente Amplio va a obtener al menos un Diputado y daremos la sorpresa en la elección de Cores”.
¿Cómo diferenciarse de los candidatos de la centro-izquierda?
“Creo sinceramente que hay candidatos que ni siquiera podemos calificar como de centro izquierda. Que se dicen regionalistas, pero van en una lista con candidatos enviados de Santiago y de derecha. Otros que aún no aclaran las platas que recibieron de SQM y millonarios fondos reservados que nunca han aclarado de donde vinieron. Y en general varios que sólo hacen campaña por redes sociales, pero que se cansan para caminar o ir a un puerta a puerta, que no creen en la gente y esto sólo lo ven como la posibilidad de estar en un cargo, sin ninguna convicción”.
En su rol como Alcalde tuvo la posibilidad de lidiar con los diversos alcaldes de la región, ¿Qué gestión destaca?, ¿Cuáles son a su juicio las principales falencias?
“Tengo una opinión crítica de lo que se hizo desde la asociación de alcaldes de la región de Antofagasta. Quiero recordar el episodio del año pasado, cuando todos los alcaldes decidimos hacer un paro regional por la descentralización y exigiendo recursos permanentes de la minería. Sin embargo, a pocos días de concretar el paro, todos los alcaldes –A excepción de nosotros- decidieron bajarse después de una reunión que sostuvimos con la presidenta y donde no nos ofrecieron nada concreto, sólo las mismas promesas de siempre. Fue vergonzoso y triste, porque se hizo toda una parafernalia para después bajarse y ceder ante la presión de Santiago. Como alcalde me quedé solo, fui el único que finalmente concretó el paro. Y hasta la fecha, de todo lo que prometieron desde Santiago no han cumplido nada. El tiempo nos ha dado la razón”.
¿Qué balance hace del gobierno de la presidenta Bachelet?
“Creo que el ímpetu de las reformas es positivo, pero finalmente se terminó cediendo a la derecha y a los intereses de los grupos económicos, porque la reforma tributaria finalmente se negoció con la derecha y los bancos en la cocina de Zaldívar. Entonces, cuando tratas de quedar bien con todos, terminas haciendo las cosas ambiguamente y sin tocar a los más poderosos. En Tocopilla el gobierno de Bachelet cumplió con la entrega de los recursos para proyectos emblemáticos, pero en mi último año como alcalde hubo un bloqueo de parte de las autoridades regionales y provinciales del gobierno, donde hubo un verdadero boicot a nuestra gestión por el sólo hecho de no pertenecer a la Nueva Mayoría”.
“A pesar de lo anterior, creo sinceramente que es destacable que el gobierno de la presidenta Bachelet haya iniciado la gratuidad en la educación, haya eliminado el sistema binominal y haya impulsado el aborto en tres causales y el proyecto de ley de matrimonio igualitario. Las buenas iniciativas hay que reconocerlas”.
Tres conceptos que se le vienen a la mente al pensar en estos candidatos presidenciales:
- Sebastián Piñera: Prepotencia, corrupción, ambición.
- Alejandro Guillier: Desconfianza, ambigüedad, experiencia.
- Beatriz Sánchez: Esperanza, nueva, construcción.
- Carolina Goic: Moderación, pasado, amabilidad.
- Marco Enríquez – Ominami: Personalismo, soberbia, preparación.
Como un hombre que ha tenido participación directa en el desarrollo de la región de Antofagasta, ¿cuál es su opinión respecto de los avances en la agenda de descentralización?
“Creo que se prometió mucho, pero hasta ahora ni siquiera se ha concretado la elección de Intendentes. Se formó una comisión, surgieron numerosas propuestas, pero hasta la fecha el grueso de esa propuesta no se ha cumplido y seguimos esperando. Creo que Santiago no está dispuesto a darle más poder y más recursos a las regiones. Quieren seguir concentrando todo y eso es un abuso”.
“El efecto del centralismo en nefasto. No nos permiten tomar nuestras propias decisiones. Deciden los planes de los diferentes servicios en Santiago, desde una oficina, sin conocer la realidad y las particularidades de cada región y cada comuna. Tenemos que andar muchas veces mendigando recursos. Aportamos cerca de un 15% del producto interno bruto, pero sólo un tercio regresa como inversión pública. Lo que se requiere es autonomía para tomar nuestras propias decisiones y un presupuesto mayor para financiar las obras y planes de desarrollo que requieren nuestras comunas”.
Con el deseo de ser un aporte para su región, y lograr ambiciosas metas en el tema de la descentralización, en los próximos años veremos si Fernando San Román cumplió con su sueño de un Antofagasta “más justo y donde el crecimiento llegue a todos”.
Sin lugar a dudas un liderazgo regional que ya ha dado pruebas de sus capacidades, pero que ahora deberá enfrentar un desafío mayor y competir por uno de los cinco cupos a diputados, entre 40 candidatos, para representar los intereses de los habitantes de Antofagasta en el Congreso Nacional.
