El senador por Antofagasta y ex candidato a La Moneda del oficialismo realizó una dura autocrítica tras los resultados de la segunda vuelta presidencial, donde perdió por amplio margen contra Sebastián Piñera
Más sereno y con la tranquilidad de las horas para analizar lo que fueron los resultados del balotaje de la elección presidencial, Alejandro Guillier, analizó el triunfo de Sebastián Piñera, las razones de su derrota y anticipó su rol dentro de la política nacional en los próximos cuatro años.
De esta forma, Guillier manifestó que “en las derrotas es cuando más se aprende y cuando las derrotas son severas como la que hemos vivido, nos obliga a cambiar mucho más. De lo que capté anoche en la reunión con los presidentes de los partidos de la Nueva Mayoría por lo pronto, en una parte del progresismo había la voluntad, la disposición y la conciencia que como nunca tenemos que trabajar unidos para levantar una sólida posición progresista en el Congreso, y lograr desde el Congreso las reformas que el país necesita”.
Al ser consultado por las causas de la derrota, el ex presidenciable del pacto Fuerza de Mayoría señaló que “creo que el país ha cambiado una enormidad. Lo que nos tiene desconcertados a todos es que en la primera vuelta uno sintió un bandazo a la izquierda, y en la segunda parecía ser un bandazo a la derecha”.
Agregando que “a pesar de los resultados adversos en lo electoral, me siento profundamente lleno, comprometido, porque la agenda que se comprometió en estas elecciones es la agenda del progresismo. Quienes ganaron esta elección van a tener que honrar y cumplir su palabra”, sentenció el senador por Antofagasta.
Y en este punto enfatizó que “Quien gobierne al país va a depender de la capacidad de realizar alianzas con la oposición… Les quiero decir que haremos sentir la voz del norte pero también la voz de Chile. En el Congreso vamos a cumplir un rol de oposición”.
Sobre esta arista profundizó sus palabras añadiendo que “aquí nadie puede restarse al llamado de la patria. Ser de oposición es ser parte de la República, y a veces es muy importante porque es la que puede dar estabilidad. Estaré disponible en la primera línea para dar gobernabilidad a Chile pero sobre la base del cumplimiento contraído ante el país que esta agenda de reformas que el país votó mayoritariamente”.
Autocrítica
Pero también hubo espacio para la autocrítica a nivel de bloque como en términos personales, resaltando en primera instancia que “tendremos que aprender a articularnos con nuevas fuerzas políticas y nuevos liderazgos que están surgiendo para poder unirnos- y no sólo en los partidos políticos, también en los movimientos sociales-, para que la agenda de reformas sea el corazón de la gestión del próximo gobierno”.
Respecto de su rol como candidato presidencial de la centroizquierda oficialista en estas elecciones, manifestó que “por lo pronto lamento no haber estado a la altura de las circunstancias y haber hecho más. Por lo tanto asumo como primera causal mi propia responsabilidad en tener un mejor liderazgo, más claro, más firme, pero espero compensar esa deficiencia con mi trabajo como senador estos próximos cuatro años”. Añadiendo que “estaré mientras la ciudadanía y el pueblo me den la confianza y yo sienta que puedo hacer una contribución”.
Al ser consultado por una nueva incursión presidencial en el futuro, Alejandro Guillier dijo que “probablemente vamos a lograr forjar nuevos liderazgos más jóvenes, más renovados, que van a representar mejor el alma de Chile y hay que tener la capacidad de ser generosos en política, no hay que aferrarse demasiado a cargos y a sueños”.