En el marco del décimo aniversario de la aceleradora de negocios de la Universidad del Desarrollo, Poderyliderazgo.cl conversó con Ángel Morales para analizar el crecimiento de la entidad y su rol en el ecosistema nacional y regional
Las aceleradoras de negocios se han convertido con los años en un pilar fundamental en el acompañamiento de propuestas de negocios y proyectos innovadores. Redes, asesorías, acompañamiento, trabajo técnico, y visión de trabajo son algunos de los puntos principales de estas estructuras.
UDD Ventures, la aceleradora de negocios de la Universidad del Desarrollo, cumplió en julio de este año una década en el ecosistema, por lo mismo Morales, a modo de balance, destaca que “En 10 años han ocurrido bastantes cambios. El ecosistema ha evolucionado de una manera enorme a nivel de estructura y procesos, pero falta mucho por hacer. Se han aumentado la cantidad de fondos públicos para emprendedores, han surgido más oficinas de venture capital, hemos tenido ciertos casos de éxito y cada día el país en general adopta una posición muy favorable hacia la creación de nuevos emprendimientos de base tecnológica y digital”
¿Cómo ha sido la evolución de UDD Ventures en una década de vida?
“Iniciamos nuestras operaciones en 2010 con la idea de ser un apoyo para emprendedores en etapa temprana. En 2012 comenzamos a trabajar con el fondo SSAF-i de Corfo para invertir en emprendimientos dinámicos. Además de los fondos, prestamos un servicio de aceleración que incluye un ingeniero de proyectos a cargo, una destacada red de mentores, talleres, consultorías en venta y levantamiento de capital, y una amplia red de contactos”.
“Hemos apoyado con fondos SSAF en nuestro rol de patrocinadores a más de 240 emprendedores en Santiago y Concepción. Por otro lado, hemos generado una reputación fuertemente enfocada en el desarrollo de las ventas de los emprendedores de nuestro portafolio, con foco en las industrias de la salud, banca, eCommerce y retail. Dado lo anterior, el 2017 Corfo nos reconoció como la incubadora con mejor valorización de portafolio y en 2019 como la mejor incubadora de negocios universitaria”.
¿De qué manera ha evolucionado el ecosistema de emprendimiento en este periodo?
“En 10 años han ocurrido bastantes cambios. El ecosistema ha evolucionado de una manera
enorme a nivel de estructura y procesos, pero falta mucho por hacer. Se han aumentado la cantidad de fondos públicos para emprendedores, han surgido más oficinas de venture capital, hemos tenido ciertos casos de éxito y cada día el país en general adopta una posición muy favorable hacia la creación de nuevos emprendimientos de base tecnológica y digital. Hemos sido testigos del desarrollo de un ecosistema que crece año a año y sin duda nos motiva a seguir trabajando para hacer de Chile un mejor lugar para emprender y hacer negocios”.
¿Es Chile un país que puede desarrollar una economía basada en la tecnología y desarrollo de startups?
“En UDD Ventures diría que el 70% u 80% de nuestro portafolio está compuesto por emprendimientos digitales que solucionan problemáticas en las industrias de la salud, banca, eCommerce y retail. La actual crisis sanitaria ha dejado de manifiesto que nuestra economía depende en gran medida del consumo interno, puesto que aún nuestra economía es más bien extractivista, y por lo tanto, se abre una gran oportunidad para avanzar en complejizar nuestra matriz productiva como lo propone César Hidalgo”.
“Creo que un país puede continuar explotando sus recursos naturales mientras que en paralelo explora nuevos rumbos productivos pensando en los próximos 30 años. En nuestro país hay talento humano, también sectores industriales donde podemos destacar al menos a nivel regional y un ecosistema de emprendimiento e innovación lo suficientemente bueno como para impulsar la exportación de conocimiento empaquetado de Chile al mundo. Podríamos apostar a ser campeones mundiales en minería, agricultura y pesca digital, por ejemplo”.
A tu parecer, ¿de qué manera una aceleradora de negocios puede influir en el desarrollo de un proyecto?
“Una buena aceleradora de negocios si hace el trabajo de manera correcta puede imprimir un salto de valor en el desarrollo de un emprendimiento con riesgo tecnológico asociado. Principalmente por el valor agregado que debiese agregar una aceleradora tiene que ver con el acceso a redes de contacto, capital y acompañamiento técnico para la validación y escalamiento del negocio. A su vez, una buena aceleradora de negocios hoy puede ser de gran ayuda para las áreas de innovación o nuevos negocios de empresas corporativas, como también para Pymes tradicionales que quieren subirse rápidamente al carro de la transformación digital”.
¿Cuáles son los puntos que se deberán reforzar de cara al Chile post-pandemia?
“Lo primero es que más Pymes puedan comenzar con el proceso de digitalización de sus negocios para mejorar los niveles de productividad a nivel país. Si queremos que Chile supere las secuelas de la pandemia es necesario poder dar el salto a una forma de trabajo más rápida, efectiva, y productiva. En segundo lugar, la omnicanalidad será la norma, con esto me refiero a generar y mejorar la experiencia de usuario de los clientes, la experiencia en el eCommerce y la logística de última milla para el caso de las pymes que venden productos físicos a cliente final. Y en tercer lugar, creo que es fundamental posibilitar la colaboración cruzada entre startups, pymes y corporaciones. Hay mucho valor que se está dejando de capitalizar por no conectar estos 3 mundos, sobre todo pensando en las posibilidades que nos entregan los procesos de transformación digital”.
La digitalización al parecer llegó para instalarse de manera definitiva en las empresas nacionales ¿Cuáles serían los consejos para retomar la actividad económica de manera segura y mantener la productividad?
“Lo primero es crear una estructura de trabajo ágil y flexible, automatizar tareas rutinarias, diseñar planificaciones estratégicas anuales con revisiones trimestrales, adaptarnos al teletrabajo (asincrónico), aprender a tomar decisiones en base a datos, abrirse a la colaboración cruzada (incluso con nuestros competidores) y centrarnos en la experiencia (omnicanal) del cliente. En este sentido, la invitación es a que las Pymes y grandes corporaciones de nuestro país que aún no lo han hecho, que se suban rápidamente al proceso de transformación de sus organizaciones. La actual crisis sanitaria es la mejor excusa para acelerar este proceso de cambio”.
¿Cómo te imaginas Chile en 10 años más?
“Espero que en 10 años más tengamos un Chile más justo, más diverso, más productivo, más colaborativo y económicamente más complejo. Creo que tenemos un tremendo país, y más que un oasis podríamos convertirnos en el faro que ilumine el desarrollo del resto de Latinoamérica en un futuro no muy lejano”.
