Varios alcaldes e iniciativas han pasado, pero sin una solución certera hasta ahora. Se trata del nuevo Centro de Tratamiento de Residuos Sólidos Domiciliarios y Asimilables Chaqueta Blanca, iniciativa que permitirá el cierre definitivo del basural La Chimba. Si bien el proyecto está en condiciones de entrar en operaciones, obras adicionales –y hasta temas administrativos- imposibilitan su puesta en funcionamiento, postergando una solución ambiental histórica para la comunidad de Antofagasta que permitirá dejar atrás el drama de miles de familias del sector norte y con ello pasar a la vanguardia medioambiental en lo que disposición y tratamiento de residuos se trata a nivel nacional
Chaqueta Blanca está listo, puede operar, pero obras adicionales que no tienen relación al tratamiento de residuos, impiden su funcionamiento. Trabajos que requieren una inversión de $3.221 millones de acuerdo a las primeras estimaciones para financiar la construcción de un nuevo sistema de aguas lluvias, entre otras acciones.
Rodolfo Bernstein, gerente general de Consorcio Santa Marta, empresa a cargo del diseño, construcción y operación de Chaqueta Blanca, explica que “podemos operar perfectamente, lo más urgente de subsanar son los permisos respectivos para la circulación de los camiones y la recepción de la Dirección de Obras Municipales (DOM). Esto último, al menos en forma provisoria, considerando que puede haber observaciones, que son normales para el tipo, envergadura y estándar de este tipo de obras”, resalta el ejecutivo.
Bernstein resalta que no ha sido fácil para la empresa llevar adelante el proyecto, pues a su juicio han debido sortear diversas complejidades que han retrasado más allá de lo planificado la entrada en operación. No obstante, destaca que “por tratarse de un proyecto tan relevante para la comunidad antofagastina, hemos contado con el constante apoyo y colaboración de las autoridades comunales como gubernamentales para avanzar y concretar esta importante obra”.
Autorización de funcionamiento
En esta senda, los permisos más relevantes para entrar a la fase de operación de Chaqueta Blanca tienen que ver con el pronunciamiento del Ministerio de Salud, organismo que ya entregó las autorizaciones respectivas. Desde comunicaciones de la misma Seremi de Salud confirmaron las versiones de prensa respecto a ello, reafirmando que Chaqueta Blanca cuenta con los permisos sectoriales de su competencia para operar, esto en función de las resoluciones que autorizan el sistema de abastecimiento y distribución de agua potable, de disposición y tratamiento de aguas servidas, para el tratamiento de residuos industriales líquidos, el funcionamiento de la planta de recuperación y reciclaje, siendo la número 586 la más relevante de todas, ya que autoriza el funcionamiento del Relleno Sanitario como tal.
Tránsito de Camiones
La propia alcaldesa, Karen Rojo, ratificó que “estamos a la espera de las autorizaciones correspondientes al ingreso y tránsito de camiones en un tramo de la Avenida Salvador Allende y a la realización de obras aluviales comprometidas por la empresa”.
Sobre esta materia, el seremi de Transportes, Waldo Valderrama, detalló que para esto fue necesario modificar la resolución de prohibición de bajada de camiones por Avenida Salvador Allende.
Lo anterior, para permitir el acceso de los camiones recolectores. Por ello, “es que se emitió un oficio con 30 medidas, el cual fue aprobado tanto por autoridades como por las juntas de vecinos del sector”, explicó el seremi de Transportes.
Dentro de las medidas se destacan establecer un calendario de mantenimiento de camiones, un sistema de seguimiento por GPS para evitar excesos de velocidad de éstos u otras situaciones anómalas en las que incurran, capacitación regular a los choferes de camiones, esto para enseñarles como debe ser su comportamiento vial durante el descenso por Salvador Allende, así como la instalación de garitas en Chaqueta Blanca y en la intersección de la avenida Salvador Allende con Circunvalación para fiscalizar los camiones, hacerles revisión mecánica permanentemente, entre otros.
Junto a ello, se definió limitar la velocidad de los camiones a 40 km/hr tanto para subida como bajada por Allende, además se implementará un listado oficial con el registro de las placas patente de todos los camiones recolectores de basura habilitados para hacer uso de la avenida Salvador Allende.
Finalmente, se destaca que los camiones contarán con una baliza de color amarillo y una señal en la que se indicará la velocidad máxima por la que puede circular.
Competencia Municipal
Desde el Gobierno Regional no se pronunciaron sobre Chaqueta Blanca. Tras más de 21 días de solicitar información a la Intendencia Regional no hubo pronunciamiento alguno, a pesar de tratarse de un proyecto que cuenta con financiamiento gubernamental vía FNDR.
Mientras que desde el Ministerio de Obras Públicas, explicaron que no podían opinar sobre este proyecto al ser de competencia de la Municipalidad de Antofagasta, es decir, una entidad externa a ellos.
Similar respuesta recibimos por parte de comunicaciones de la Secretaría Regional de Medio Ambiente, quienes indicaron que no tienen competencia para hablar de Chaqueta Blanca, al ser una materia radicada en el edificio edilicio de Antofagasta.
Quien sí ahondó sobre Chaqueta Blanca fue la alcaldesa de Antofagasta, Karen Rojo, quien dijo que estamos frente a un proyecto donde “las expectativas del municipio son tan altas como la de todos los vecinos de Antofagasta. Este es un proyecto que es esperado por toda la comunidad desde hace más de 40 años y con el cual buscamos no sólo dar respuesta a esta demanda histórica de la comuna sino dar pasos importantes hacia la vanguardia medioambiental”.
Más Moderno
En especial, “porque esta iniciativa involucra una infraestructura que se hará cargo de los residuos domiciliarios y asimilables de una manera integral gracias a su Relleno Sanitario, a su Planta de Reciclaje y su Planta de compostaje, convirtiéndola en una de las más modernas y eficientes del país”.
Durante la primera quincena de agosto, la Municipalidad de Antofagasta comenzará con la ejecución del nuevo contrato de recolección de basura, con el cual “aumentamos nuestra cobertura a 90 sectores de la ciudad y comenzaremos de manera formal el proceso de recolección selectiva o segregación en origen, que realizamos como piloto en 12 sectores vecinales”.
En tanto, Solano Araya, profesional de la Secretaría Comunal de Planificación del municipio, precisó que este proyecto no es sólo retirar la basura de los hogares y cerrar el vertedero, habilitando un nuevo lugar, sino que se trata de un Centro de Tratamiento de residuos, que además implica un “tratamiento de la basura” generando nuevas utilidades y, de esta manera, “seremos mucho más sustentables y amigables con el medio ambiente”.
Calidad de Vida
Para quiénes si es importante la puesta en marcha, ojalá inmediata de Chaqueta Blanca, es de los vecinos, que viven en los alrededores del basural La Chimba.
Como lo indica Víctor Silva, vocero del Movimiento “No más Quemas”, resulta vital la consolidación de esta obra y su puesta en marcha, “porque la semana pasada visitamos el proyecto y nos dimos cuenta que puede empezar a operar mañana mismo”.
Agregando que “ya no vemos a Chaqueta Blanca en un plano, sino que es una realidad. Ojalá superé lo más rápido posible las observaciones de la resolución de calificación ambiental”.
“Nos interesa que el actual vertedero cierre. Si bien disminuyeron las quemas, éstas siguen existiendo, y es inminente su correr. Para los trabajadores (del vertedero y que serán reconvertidos en Chaqueta Blanca), lo vecinos, es la mejor opción. Nos sentimos contentos, pero seguiremos luchando por nuestra calidad de vida, y que cierre rápido, pero también se inicie un buen plan de reconversión (ver recuadro) de ese terreno”, argumentó el vocero de “No más Quemas”.
Reconversión con Dignidad
A ello hay que sumar que “éste será un cambio radical y para mejor trabajar en Chaqueta Blanca”, recalca Francisco Figueroa, presidente del Sindicato de Recolectores La Chimba, estimando que serán unas 200 familias beneficiadas con el comodato de la estación de transferencia.
“Hasta ahora trabajamos sin ninguna protección y con nuestra ropa. Allá, Santa Marta nos dará uniforme, casco, guantes, máquinas modernas y nos prepararán. Es decir, trabajaremos con dignidad”, agrega Figueroa.
Por ello, anhelan la pronta puesta en marcha de la planta, considerando además, que deberán ser capacitados en sus nuevas tareas, cambiando la forma de trabajar en la basura, pasando de una forma prácticamente individual e improvisada, a un trabajo profesional y en equipo.
Los integrantes del Sindicato de Recolectores La Chimba han visitado el proyecto en al menos tres veces, donde han podido interiorizarse de la Planta de Reciclaje y su funcionamiento, además de lo que serán sus futuras instalaciones como comedores, baños y salas de cambio entre otras mejoras a la actual forma de trabajar.
Proyecto inédito
Chaqueta Blanca viene a cambiar el tema de la basura en Antofagasta. Sólo en lo que respecta al Relleno Sanitario, el municipio estima recibir en el primer año 230 mil toneladas de residuos aproximadamente.
De este volumen de residuos, se proyecta que al menos, en una primera etapa, serán del orden de 70 toneladas las que se reutilizarán a partir del trabajo de la Planta de Reciclaje. Por otra parte, se contempla una planta de compost, la que tratará la materia orgánica que llegue al reciento para convertirla en abono para ser utilizado en mantención de plazas, parques y otras áreas verdes de la comuna.
Por primera vez, Antofagasta contará con un sistema de reciclaje y compostaje de desechos domiciliarios a la altura de una ciudad que se encamina en la vanguardia ambiental.
Además, se pondrá fin al vertedero, el cual será recuperado y convertido en un gran pulmón verde, a través de un plan maestro, y así dejar en el pasado las quemas ilegales que tantas molestias y preocupaciones ha generado en especial a los vecinos que viven en zonas aledañas al basural.
Cierre de La Chimba
Una vez que entre en funcionamiento Chaqueta Blanca comenzará el cierre definitivo del Vertedero La Chimba. “Ya estamos trabajando a través del estudio de prefactibilidad para el plan de remediación y en el que estamos presentando el Estudio de Impacto Ambiental ante el SEA para su aprobación”, asegura la alcaldesa Karen Rojo.
“Ambos proyectos han sido de largo aliento y de mucho compromiso de todos los funcionarios municipales para que salgan adelante. No estuvimos exentos de obstáculos y de pugnas políticas, pero gracias a Dios y al trabajo serio que realizamos todos, logramos avanzar y concretar este gran sueño para Antofagasta”, resalta la edil de la Perla del Norte.
Así las cosas, sobre Chaqueta Blanca y su funcionamiento existen grandes expectativas para los habitantes de una de las ciudades más importantes del país, expectativas que hoy descansan en manos de las autoridades y sus gestiones para acelerar la pronta entrada en operación de un proyecto ambiental con un impacto social de envergadura, ya que significará un cambio radical en la forma de tratar la basura y, lo más importante, en la calidad de vida de miles de antofagastinos que hoy siguen soportando los efectos de vivir a metros de un basural.