El Electrolizador H2 Mining, aplicación tecnológica que adiciona hidrógeno al proceso de combustión en equipos fijos o móviles para hacerlos más eficientes, obtuvo promisorios resultados en su prueba piloto: más de 52% de reducción en las emisiones totales de hidrocarburos y una baja de 24% de emisiones de dióxido de nitrógeno
El Centro Nacional de Pilotaje, CNP, realizó con éxito la prueba a nivel industrial del Electrolizador H2 Mining, innovación de la empresa chilena Infinity H2, que requiere solo de agua destilada para que la energía de los mismos equipos genere hidrógeno, logrando procesos de combustión más eficientes y ambientalmente más limpios.
“La validación de esta nueva aplicación tecnológica está en la línea de los ámbitos en que el CNP está trabajando para contribuir a que innovaciones sustentables aceleren su entrada a la minería; además de aportar con un paso para que el país se convierta en el futuro en una potencia en la generación de hidrógeno verde”, señala Juan Cariamo, presidente del directorio del Centro Nacional de Pilotaje.
El pilotaje obtuvo resultados muy significativos, con más de la mitad (52%) de reducción de las emisiones totales de hidrocarburos y cerca de un cuarto (24%) de reducción en las emisiones de dióxido de nitrógeno.
Para Cristián Bowen, program manager & Special Affairs de Infinity H2, lo más relevante “es contar con la certificación de Centro, reconocido a nivel nacional y que nos permite abrir las puertas de nuevos nichos como la minería. Incluso antes de salir al mercado, quisimos probar a nivel industrial que esta tecnología realmente funciona y que está validada por un ente externo, como es el CNP”.
El equipo de ingenieros del CNP realizó la planificación y, además, buscó una empresa para realizar la prueba y que estuviera interesada en adquirir la tecnología si resultaba exitosa. Este fue el caso de la empresa IMELSA, que tiene motores a diésel en desuso y requería aplicar una tecnología para reutilizarlos y transformarlos en generadores de energía.
“El haber logrado un cliente para nuestra aplicación es un valor agregado para las empresas que llegan al CNP, porque no solo certifica el pilotaje, sino que te conecta con posibles clientes o sitios de prueba interesados en probar las tecnologías,” señala Cristián Bowen.
El pilotaje se realizó en un motor del año 2005 con tecnología Euro 3, certificación que se exigía para el transporte público en Santiago y que es bastante alta para el sector industrial. Se necesitaba reducir los niveles de contaminación del proceso de combustión de los motores, en particular los de NOX y los hidrocarburos totales, que son los más dañinos para las personas y el medio ambiente; además de no aumentar el consumo de petróleo, ya que al generar hidrógeno se gasta energía.
Por ello se realizaron mediciones del consumo de petróleo y de las emisiones sin el equipo y luego con el electrolizador, por lo que participaron empresas especializadas en certificaciones de emisiones para obtener datos correctos y creíbles.
“Estamos muy satisfechos de esta validación tecnológica, que va en línea con las próximas pruebas que vamos a hacer en los próximos meses en los ámbitos de sustentabilidad, eficiencia del recurso hídrico y protección del medio ambiente, que incorporan tecnologías que disminuyen el uso del agua y de los gases de efecto invernadero, mejorando los espacios laborales, de seguridad y del medio ambiente”, explica Patricio Aguilera, gerente general del CNP.
Básicamente la tecnología ocupa la misma energía de la batería del motor para su propio funcionamiento introduciendo la corriente eléctrica necesaria para separar el agua en hidrógeno y oxígeno, los cuales se incorporan a la cámara de combustión generando un proceso más eficiente.
El ingeniero de proyectos del área de operaciones del CNP, Pietro Cayo, a cargo de gestionar y aplicar los protocolos y procedimientos de trabajo que permitieron el correcto desempeño de las pruebas en terreno, explicó que la prueba fue satisfactoria pues se comprobó que la tecnología diseñada funciona en la práctica. “Se lograron recabar los indicadores clave en terreno, los cuales tras la correcta aplicación de nuestros protocolos de prueba proporcionaron la conformidad de la validación como CNP,” aseguró.
El proceso de pilotaje se realizó durante la actual contingencia sanitaria, por lo que hubo que superar algunas situaciones operativas. Las pruebas piloto contemplaron el uso de equipos y la participación de profesionales de EE.UU. (de Infinity H2); así como también la tramitación de permisos del proyecto para dar cumplimiento a la normativa vigente. El equipo del CNP logró llevar a cabo satisfactoria-mente el proceso, que tuvo una duración de 2 semanas de planificación y 2 días de la prueba piloto.
Ventajas de la nueva tecnología de hidrógeno
El Electrolizador H2 Mining se presentó al concurso Impacta Minería 2019 del CNP, resultando uno de los 10 finalistas. Luego de la prueba de escalamiento industrial, la Infinity H2 iniciará la fase de comercialización. Esperan en marzo del próximo año estar ya en el mercado con los motores reutilizados (de IMELSA) y los sistemas que reducen las emisiones (de Infinity H2).
Algunas de las ventajas de la nueva tecnología de hidrógeno:
- Puede utilizarse equipos fijos, como un generador; o móviles, como los camiones mineros.
- Se instala en menos de un día y la mantención se realiza cada seis meses.
- El equipo consume agua destilada en pocas cantidades. Para la prueba piloto se utilizó un galón de agua destilada.
- Si deja de funcionar por cualquier motivo, el motor vuelve a utilizar el sistema anterior.
Infinity H2 es una empresa que está innovando y desarrollando aplicaciones y tecnologías relativas al hidrógeno y a la eficiencia energética. De los tres socios que la componen, uno de ellos es ingeniero certificado de la NASA y experto en hidrógeno; y también cuentan con el apoyo de la compañía estadoundense Infinity Industrial Controls.