El parlamentario aseguró que su partido es visto como de “clase B” por el Gobierno y que no son considerados a la hora de tomar decisiones a diferencia de lo que sucede con los restantes integrantes de la coalición
El cambio entre dos antofagastinas, radicales e integrantes de los pasados gobiernos de Bachelet, en la cartera de minería, ahondó críticas desde el propio oficialismo al cambio de Gabinete, es que la salida de Marcela Hernando por la también radical Aurora Williams acarreó molestias al interior del Partido Radical, según los manifestado por el diputado por el Maule, Alexis Sepúlveda.
En entrevista de #PlazaRegional de poderyliderazgo.cl, el congresista emplazó a los militantes de su colectividad a evaluar la permanencia en el Gobierno, argumentando que en esta ecuación Boric ha dado un trato desigual a su partido en relación con el resto de la coalición y no solo eso, sino que además asumen los costos de los errores cometidos producto de decisiones en las cuales no participan.
Sepúlveda detalla que comentó en la interna de su partido el cambio de gabinete “Conversé con el presidente nacional (del PRSD) en la mañana y él (Leonardo Cubillos) me señaló que en ningún momento fue contactado por La Moneda para poder estudiar, conversar, el cambio de la ministra Hernando. Lo sentimos bastante. Diría que toda la bancada”.
El legislador, que recientemente asumió la Vicepresidencia del Parlamento Andino, se quejó de que los radicales han recibido un trato distinto por parte del gobierno “Entendemos que el presidente tiene la atribución, pero creo que el partido Radical no ha sido tratado igual que los otros partidos con quienes hubo un diálogo, fueron sus presidentes nacionales a La Moneda, se conversó con ellos el diseño, más allá de que la decisión sea del presidente”.
El representante del Maule continuó su crítica haciendo presente la tesis de los anillos “sigue existiendo esta relación de partidos A y partidos B. Estos anillos que en algún momento se señaló y yo siento que en el caso del Partido Radical no se le ha tratado con la misma dignidad, con el mismo respeto que se le ha tratado al resto de los partidos de la coalición”.
“El Partido Radical tiene que sentarse y evaluar la conveniencia de seguir o no participando en el gobierno (…) creo que hay que ver efectivamente cuál es el espacio político -que no tiene que ver con cargos más o cargo menos- sino de participar de las decisiones”, manifestó asegurando que “el Partido Radical definitivamente no participa de ninguna decisión del gobierno estratégica ni nada por el estilo, no es considerado”.
Pese a todo aclara que “esto no significa irse a la derecha ni nada por el estilo, sino que sincerar lo que durante largo tiempo ya ha sido un trato más bien desigual (…) creo que es muy legítimo que el Gobierno diga que este es el espacio político que merece el Partido Radical al interior del gobierno y no hay más”.
En su análisis, el congresista detalló que principalmente están asumiendo los costos de una mala gestión “estar en un gobierno donde no se nos considera nada, en donde nuestra opinión prácticamente no vale, donde no participamos de las decisiones relevantes, donde nos llevamos solamente los costos de todos los errores que se han cometido y de la falta de gestión que hemos visto en el último tiempo, La verdad que uno debería reevaluar si vale la pena o no estar en el gobierno”.
Finalmente llamó a recuperar la posición equidistante dentro de la centroizquierda “donde siempre hemos estado en nuestro pensamiento socialista, democrático, socialdemócrata, que creo que ha perdido un espacio importante y que eso se refleja en la encuestas y las últimas votaciones”.
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