Por: Richard Andrade C. Director de Poderyliderazgo.cl
Este 14 de julio quedará marcado en la historia republicana de nuestro país, con el correr de los años se hablará del día en que asumieron los 16 gobernadores regionales, dando un paso trascendental en materia de descentralización y fortalecimiento de las regiones, de los territorios y de todos quienes vivimos en provincia.
Llegar hasta acá no ha sido fácil, una y otra vez se atentó contra este histórico proceso, hasta el último día se buscó entorpecerlo… el gobierno de Sebastián Piñera hizo todo lo posible para impedir avances sustanciales y generar una correcta y adecuada instalación de esta nueva autoridad electa por la ciudadanía, y lo ha hecho en complicidad con los centralistas, de izquierda, centro y derecha del país, que imponen visiones y acciones desde el Congreso, los gremios empresariales y los medios de comunicación.
El actual gobierno insiste en reforzar la figura de los delegados presidenciales, una instancia condenada a desaparecer gradualmente en la dinámica política y social regional, cuando lo correcto es responder al clamor ciudadano de más autonomía, más decisiones y más recursos para las regiones, para los Gobernadores Regionales.
Desprenderse de poder nunca ha sido fácil, requiere empatía, nobleza, solidaridad y, por sobre todo una visión país que vaya más allá de Santiago y atreverse con decisión a generar las condiciones necesarias para llevar el desarrollo y progreso a todos los territorios del país. Sebastián Piñera ha hecho todo lo contrario.
Ahora bien, más allá de las dificultades y resistencias, como medio de comunicación comprometido con el presente y futuro de las regiones, creemos necesario reconocer la visión de la expresidenta Michelle Bachelet y su decisión de crear la Comisión de Descentralización en el año 2014, sentando con ello gran parte de las bases de esta nueva gobernanza territorial.
Es hora de reconocer la incasable labor desarrollada por la Fundación Chile Descentralizado, de su presidente Heinrich von Baer, de sus directivos y capítulos regionales, pues han sido ellos los principales promotores de la importancia de la descentralización como motor de desarrollo de la nación.
Corresponde reconocer y valorar también el trabajo permanente de Esteban Valenzuela, de Egon Montecinos, de Gonzalo Vial; de los senadores Alejandro Guillier, Francisco Chahuán y Carlos Bianchi; de los diputados Rodrigo González, Jaime Mulet y Esteban Velásquez, y de muchos otros más hombres y mujeres que no han escatimado esfuerzos para sensibilizar, educar, difundir y defender la relevancia de las regiones y sus habitantes.
Sabemos que el contexto y condiciones en que asumen los Gobernadores Regionales dista mucho del ideal y de lo que realmente se necesita para concretar sus programas de gobierno regional, por lo mismo pedimos a los convencionales constituyentes analizar y proponer con seriedad y decisión un modelo de descentralización que fortalezca el actuar de las nuevas autoridades, con más recursos y más facultades. Asimismo, exigimos a los diversos candidatos presidenciales compromisos concretos y presentar a los chilenos propuestas de políticas públicas que vayan en beneficio de las regiones. Santiago no es Chile señores.
Finalmente, deseamos el mayor de los éxitos a Jorge Díaz: José Carvajal; Ricardo Díaz; Miguel Vargas; Krist Naranjo; Rodrigo Mundaca; Claudio Orrego; Pablo Silva; Cristina Bravo; Óscar Crisóstomo; Rodrigo Díaz; Luciano Rivas; Luis Covertino; Patricio Vallespín; Andrea Macías y Jorge Flies. Les pedimos también responder con profesionalismo, compromiso y entrega a la tremenda labor que tiene por delante, a desprenderse de aquellas prácticas políticas que han alejado a la ciudadanía de la cosa pública, a ser los líderes que sus territorios necesitan y merecen, pues serán ustedes los protagonistas principales de un nuevo ciclo, de una nueva etapa donde las regiones deben ser el pilar fundamental para el desarrollo de Chile y sus habitantes.
