Por: Richard Andrade C. Director de Poderyliderazgo.cl
Esta semana conmemoramos un nuevo Día de la Mujer y por lo mismo vemos necesario resaltar las tremendas brechas e injusticias que aún existen en materia de derechos femeninos en nuestra sociedad, una realidad que se confirma a diario con estadísticas y datos, pero que claramente no logran mover los cimientos más profundos del machismo chileno arraigado a lo largo y ancho de los territorios.
Por lo mismo, es meritorio resaltar las palabras del Presidente Gabriel Boric a solo días de asumir la Presidencia de Chile y ad portas de un nuevo 8M. “Me gustaría hablarle a los hombres, no solamente a los más viejos, sino que a todos los hombres que guardamos de manera también un poco inevitable el machismo en el que fuimos formados… Esto no es una banalidad, esto no es una respuesta postmoderna a demandas identitarias, sino que estamos hablando de un compromiso que está en la base de nuestro Gobierno: el ser un Gobierno feminista significa cambiar la manera en la cual nos relacionamos, con la cual vemos el mundo”.
Tras estas palabras se observa un compromiso real y concreto de parte del presidente electo con las mujeres del país, el cual tiene su primera confirmación con el establecimiento de un gabinete presidencial paritario, entendiendo que las actitudes, visiones y capacidades femeninas son claves para alcanzar las tremendas transformaciones que demanda el país.
Esperamos que a la hora de las designaciones de las autoridades regionales se continúe con dicha visión, pues las mujeres de regiones también cuentan con el compromiso, profesionalismo, capacidades y talentos necesarios para impulsar los cambios que encarna el programa de Gobierno de Gabriel Boric.
No se trata de una moda, bien lo dice Boric… corresponde a un necesario cambio de paradigma, de dejar atrás siglos de indiferencia y menoscabo de la mujer, de reconocer y valorar a diario -y en todas las esferas de la sociedad- el aporte que ellas realizan y pueden generar.
Debemos entender que se trata de una oportunidad para cambiar la forma de relacionarnos y construir juntos la sociedad que anhelamos, pues no existen dudas que tanto mujeres como hombres queremos un Chile mejor para vivir.
Hoy la realidad de las mujeres que viven en Chile exige acciones concretas para reducir las brechas existentes. Demanda que el mundo empresarial, político y social entregue los espacios necesarios para el integral desarrollo de las mujeres, es de toda justicia terminar con las diferencias salariales que atentan contra la dignidad, crecimiento y desarrollo de la mujer. Es hora de avanzar en serio en Equidad e Igualdad de Género
Es imperativo y enriquecedor fomentar la inclusión de las niñas y adolescentes en aquellos ámbitos históricamente reservados para los hombres… es hora de educar y formar ciudadanos y ciudadanas empáticas y conscientes que en el respeto, la inclusión, el diálogo y la tolerancia descansa el futuro de Chile.
Un futuro que se construye desde las regiones, desde las provincias, desde la ruralidad y el campo, donde las brechas e injusticias que viven las mujeres son aún más grandes, y que por lo mismo requieren de políticas públicas integrales para erradicar el machismo tan arraigado en nuestra sociedad.