En el marco del PDT de Corfo, que busca crear un modelo gastronómico con identidad regional que rescata la tradición culinaria de la Región de Tarapacá. Participan de la iniciativa 33 pymes culinarias de la zona
El destacado sommelier Claudio Hernández Checura fue el principal relator del taller de enología y maridaje dirigido a chef y restaurantes regionales a través del “Programa de Desarrollo Tecnológico (PDT) Gastronómico con Identidad Regional”, proyecto apoyado por Corfo y ejecutado por Inacap, sede Iquique.
El experto es “head sommelier” de la Viña Viu Manent, teniendo como cobertura el mercado chileno y latinoamericano. Hernández, explicó su experiencia y entregó detalles para fortalecer la gestión de los establecimientos gastronómicos de la Región de Tarapacá. Asimismo realizará visitas durante la semana a siete restaurantes de Iquique, y además conocerá el proyecto vitivinícola de Canchones desarrollado por la Universidad Arturo Prat.
El PDT de Corfo se orienta a la creación de un modelo gastronómico con identidad regional que rescata la tradición culinaria de la Región de Tarapacá. El proyecto beneficia a 33 pymes del rubro y tiene una inversión de 96 millones de pesos en un plazo de 12 meses.
El director regional de Corfo, Raúl Fernández Rojas, señaló que “por intermedio de esta herramienta queremos potenciar las empresas del sector gastronómico con productos y servicios propios a partir de elementos claves como la revalorización y rescate de la tradición culinaria regional y la identidad tarapaqueña”. El desarrollo del programa también contempla un proceso de innovación, sincretismo gastronómico (laboratorio gastronómico participativo), un plan de difusión y la promoción de buenas prácticas a través de una escuela gastronómica.
El programa, desde la perspectiva operacional, desarrollará un registro y actualización de un banco digital de gastronomía vernácula tarapaqueña (caracterización, origen, recetarios, etc.), habilitará un laboratorio gastronómico móvil (transferencia tecnológica participativa), creará una escuela gastronómica (talleres de enología, maridaje, repostería típica y comida fusión), generará un programa de buenas prácticas (formación y diseño de manual para un buen servicio), realizará una misión tecnológica (ruta gastronómica), contará con intervenciones urbanas y rurales, además de clases magistrales y seminarios.