Senador independiente por la región de Valparaíso apuesta porque Chile se convierta en una República Digital
Apostado desde mucho antes de la pandemia a lo que él denomina “República Digital”, que no es más que la relación digital entre el estado y los ciudadanos, el bautizado Ciber Senador, Kenneth Pugh Olavarría (Región de Valparaíso) posiciona a Chile a mitad de este camino, destacando las brechas en materia de ciberseguridad y protección de datos personales.
Dicha apreciación -así como sus visiones de la Agencia de Seguridad, la descentralización, regionalismo y los futuros gobernadores regionales, entre otros- la entregó en nueva edición de la “La Entrevista con…” de Poder y Liderazgo.
“Nuestro Estado no ha evolucionado. Ahí es donde estamos mal. Estamos atrasados. Esta pandemia nos pilló desprevenidos. No hay una política de datos, no hay interoperabilidad”, aseguró el parlamentario, destacando además que es “necesario generar y reconvertir capital humano”.
Proyecto dormido
Pugh recordó que desde 2017 hay un proyecto de ley que no ha logrado avanzar, pese a que el gobierno lo repuso a principio de años “Estamos con una ley que todavía está detenida en el Senado en espera de su tramitación o sea estamos a mitad de construir una república digital para qué, para mejorar los servicios del Estado, el relacionamiento, darle la oportunidad a la ciudadanía que se pueda expresar mejor, pero también al Estado que pueda reaccionar instantáneamente cuando así lo requiera. La Pandemia esto lo desnudó”.
Pese a las deficiencias, el senador independiente reconoce que la pandemia obligó a la “convergencia del mundo físico con lo digital”, avanzando en un año lo que de otra manera hubiese tardado 10. Y no se queda ahí. Su apreciación es que este nuevo período de pandemia se traducirá en un avance que estaba proyectado para 20 años. Pugh es claro “Hemos crecido tanto que es difícil volver atrás”.
El representante porteño y ex vicealmirante de la Armada asegura que muchos de los elementos adquiridos no tendrán un retorno, solo se convertirán en modelos híbridos entre lo digital y lo presencial.
Estado digitalizado
“Chile estaba mal, en el sentido que no teníamos todavía cohesionada esta estructura de datos, pero creo que nos ha servido (la pandemia), tal como nos sirvió el terremoto y tsunami en 2010, este fue un terremoto y tsunami digital que no has pegado fuerte y por eso estamos atrasados en muchas de las cosas, atrasados en la data para poder entregar beneficios de forma efectiva, disponiendo de los recursos”, reflexionó Pugh.
Por ello sus expectativas en estas materias es que “La pandemia nos deje un Estado digitalizado, pero que esa trasformación se haga con ciberseguridad. Esa es la esencia de la república digital, donde garanticemos nuevos derechos en la constitución, como ejemplo el derecho al relacionamiento digital del ciudadano con el Estado. Si logramos eso, vamos a transformar Chile y vamos a hacer realmente una República Digital”.
Para el senador, integran de la comisión de Defensa de la Cámara Alta, “estar digitalizado significa que el Estado conoce exactamente la realidad de las personas con las transacciones diarias que van ocurriendo, no lo tiene que pedir a alguien que postule a un beneficio, no le tiene que pedir a alguien que se inscriba, por qué, por qué los datos se entregan una vez y ese dato después se vincula con el resto de los otros datos, mediante los mecanismos de interoperabilidad y eso es lo que permite al Estado saber en la condición que están las personas”.
Para Pugh Olavarría, estas acciones permitirían un mejor desempeño al ejecutivo “en las condiciones excepcionales que estamos ahora, concurrir con los beneficios directamente y llegar, ¿por qué? Porque tenemos todo conectado”.
Protección de datos
No obstante, la autoridad hace notar que “esa conexión es la que tenemos que ser capaces de generar, pero con resguardo. ¿cuáles son los resguardos? El primero la protección de los datos personales, la primera propiedad de las personas son sus datos personales, es propiedad privada y uno autoriza y da consentimiento para que se usen con un fin específico, por ende, nadie los puede filtrar y usar para otros fines que no sean aquellos que se dieron autorización ya sea el estado o los privados”.