Fusión histórica impactaría directamente en las regiones de Antofagasta y Tarapacá, donde ambas compañías mantienen importantes operaciones mineras como Escondida, Lomas Bayas y Collahuasi. La transacción, valorada en US$158.000 millones, consolidaría al nuevo conglomerado como líder global del sector, superando a BHP
Las mineras Rio Tinto y Glencore Plc iniciaron conversaciones preliminares para fusionar sus operaciones globales, según informó Bloomberg News citando fuentes cercanas al proceso. La operación, que sería la mayor en la historia del sector minero, daría origen a una compañía valorada en US$158.000 millones, superando los US$126.000 millones de la actual líder BHP.
La potencial integración tendría un impacto significativo en la minería chilena, especialmente en las regiones de Antofagasta y Tarapacá, donde ambas compañías mantienen importantes activos. Rio Tinto controla el 30% de minera Escondida, mientras que Glencore es propietaria de Compañía Minera Lomas Bayas y posee una participación del 44% en Collahuasi.
Las conversaciones entre ambas empresas no son nuevas en el sector. En 2014, Rio Tinto rechazó una propuesta similar de Glencore que también buscaba superar a BHP como líder mundial de la industria minera.
Los analistas de RBC señalaron que “no está claro si se trataría de una simple fusión o requeriría la división de ciertas partes de cada empresa”. Agregaron que “el acercamiento de BHP a Anglo American el año pasado bien puede haber catalizado las conversaciones entre los dos”.
Para Rio Tinto, la operación permitiría aumentar su exposición al cobre a través de yacimientos como Collahuasi, uno de los depósitos más codiciados por la compañía durante la última década.
La fusión plantea interrogantes sobre el futuro de los activos carboníferos de Glencore, considerando que Rio Tinto se desvinculó de este sector hace varios años. Glencore mantiene una posición dominante en el mercado del carbón térmico y coquizable.
