Corfo lanzó programa que ejecuta la Universidad Santo Tomás dirigido a microempresas y pymes regionales, y que beneficia además a un grupo de emprendedoras de Tacna, Perú.
En el marco de la inauguración de la Primera Feria de Emprendimiento de Arica, se realizó el lanzamiento del Programa de Apoyo al Entorno para el Emprendimiento y la Innovación (PAEI) que apoya Corfo y que es ejecutado por la sede Arica de la Universidad Santo Tomás (UST).
En la ocasión, se certificaron además a los primeros 18 talleres desarrollados de los 35 propuestos hasta octubre próximo, atendiéndose a la fecha el 70% de los 500 inscritos a principio de año.
El PAEI que ejecuta la Universidad Santo Tomás beneficia a diversas organizaciones, como la Corporación de Mujeres de Negocios y Profesionales de Arica, la Cámara de Comercio Detallista de Arica, Asociaciones de Pueblos Originarios locales y usuarios del Servicio Jesuita de Ayuda al Migrante, además de la comunidad universitaria.
“Quiero agradecer la oportunidad que me brinda Corfo para superar la frontera de la pobreza y seguir aprendiendo de mi emprendimiento. Este esfuerzo de venir desde Tacna está teniendo su recompensa”. Así resumió la psicóloga tacneña Marcela Silva su participación en el Programa PAEI. Al igual que ella, son muchos los que están viendo los frutos del esfuerzo y dedicación que han aportado a esta iniciativa que persigue crear condiciones propicias que consoliden el ecosistema emprendedor.
Respecto a ello, el coordinador regional del Área Emprendimiento de Corfo, Leonel Claros, precisó que esta iniciativa apunta a “entregar habilidades para que mejoren su capacidad negociadora, aprovechen las oportunidades de conectarse con el país vecino, que sepan dar valor a su producto”.
Asimismo, agregó que “este proyecto permite llegar a aquellos segmentos a los cuales no se había llegado, como son los que carecen de financiamiento, como por ejemplo mujeres que hoy no tienen oportunidades y es por eso que los talleres se llevan a cabo en horario vespertino, permitiéndoles a ellas participar sin problemas”.
Sobre lo anterior, María Del Mar Ballesteros, coordinadora de este proyecto, resaltó el alto interés por participar de los talleres tanto a nivel local como en Tacna. “Al comienzo fue complicado, porque estaban todos de vuelta de vacaciones de verano. Pero se fue conociendo y fuimos teniendo participantes”.