¿Qué necesita Chile para conquistar el futuro de la economía digital?

0

Por: Luz María García. Gerente General Asociación Chilena de Empresas de Tecnologías de Información (ACTI A.G.)


Con el inicio de 2025, Chile se encuentra frente a un momento decisivo en su camino hacia la consolidación de la economía digital. Después de un 2024 lleno de avances significativos, el país debe ahora afrontar nuevos desafíos que marcarán el rumbo de su transformación tecnológica en los próximos años.

La aprobación de leyes como la Ley Marco de Ciberseguridad, la Política Nacional de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación, y la presentación de los planes nacionales de inteligencia artificial (IA) y data centers fueron algunos de los hitos destacados, que han sentado las bases para un futuro más conectado y tecnológico. Sin embargo, aún queda mucho por hacer para que estas iniciativas se traduzcan en beneficios tangibles para todos los sectores de la sociedad.

Adicionalmente, este año el Gobierno proyecta el cierre del proyecto de Fibra Óptica Nacional, que ya cuenta con tres macrozonas en operación, y el inicio de la ejecución del Plan Nacional de Data Centers, con la definición del rol de cada actor del ecosistema digital y la implementación de las nueve medidas clave contempladas en dicha iniciativa.

Este nuevo año promete ser crucial para la consolidación de tecnologías emergentes como la IA y la computación cuántica, que tienen el potencial de transformar no solo la economía, sino también la vida diaria de los chilenos.

La propuesta de la Ley de Inteligencia Artificial, que busca posicionar a Chile como el primer país de la región en contar con una normativa específica para regular esta tecnología, es uno de los mayores retos del 2025. Si bien su discusión es un paso importante, la verdadera prueba será su aprobación y la manera en que se implementará.

En este contexto, las elecciones presidenciales de noviembre marcarán el rumbo del país. Los futuros líderes tienen la responsabilidad de asegurar que la digitalización siga siendo una prioridad estratégica y las propuestas de los candidatos deben enfocarse más allá de los beneficios inmediatos de la tecnología. Llevan sobre sus hombros el deber de crear un entorno propicio para la innovación a largo plazo. Las decisiones políticas que se tomen en los próximos meses y años serán determinantes para fortalecer la infraestructura digital.

Más allá de promesas a corto plazo, se requiere un enfoque estratégico que priorice la inversión en infraestructura tecnológica, fomente alianzas público-privadas para acelerar la transformación digital y garantice políticas inclusivas que integren a todos los ciudadanos en esta nueva economía.

Será clave que las propuestas de los candidatos presidenciales de 2025 reflejen una comprensión profunda de los desafíos tecnológicos y sociales del país, y que se comprometan a diseñar planes concretos que aseguren una transición digital sostenible, equitativa y beneficiosa para toda la población.

La economía digital es una oportunidad de crecimiento y una necesidad para el por venir del país. Solo a través de la innovación tecnológica y el aprovechamiento de las herramientas digitales, Chile podrá enfrentar los desafíos globales, fortalecer su competitividad y asegurar un futuro próspero para las nuevas generaciones.


El contenido expresado en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor y no representa necesariamente la visión ni línea editorial de Poder y Liderazgo


 

Compartir

Acerca del autor

Deja tu respuesta