Ignacio Merino, Director Ejecutivo de HUBTEC, destaca que uno de los principales retos que ha enfrentado el hub ha sido la madurez limitada del ecosistema de innovación en Chile
Ante la necesidad de que la ciencia y la tecnología generen un mayor impacto para apoyar la transición hacia un modelo de desarrollo sostenible y fortalecer su rol en la sociedad, en los últimos años se han impulsado diversas iniciativas.
Una de las más significativas ha sido la creación de los centros de transferencia tecnológica, y dentro de ellos destaca HUBTEC, que en octubre celebra siete años de funcionamiento, enfocado en articular capacidades y redes para transformar el conocimiento, las capacidades y tecnologías desarrolladas en universidades y centros de I+D en soluciones concretas que logren un impacto positivo en la economía y la sociedad.
De acuerdo con el Global Innovation Index 2024, desarrollado por la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), Chile ocupa el puesto 51 en el ranking global. Dos de las grandes brechas que se identifican en el ecosistema chileno son la baja conversión de la ciencia que se produce en el país en aplicaciones, productos y servicios que generen impacto, y la fragmentación del ecosistema.
Estas son justamente las brechas que los hubs de transferencia tecnológica buscan cubrir, con el objetivo de impulsar una mayor vinculación entre el sector académico y socio-productivo, promoviendo la adopción de innovación de base científico-tecnológica.
El impacto de HUBTEC se ve reflejado en su capacidad para articular a actores clave del ecosistema de innovación, como universidades, centros de investigación y empresas, logrando que más proyectos y emprendimientos de base científico-tecnológica de origen universitario avancen hacia su validación y transferencia al mercado. Su enfoque ha estado en acompañar los proyectos y emprendimientos desde las fases más tempranas, identificando tecnologías con potencial de impacto y acelerando su desarrollo, lo que ha contribuido a mejorar las probabilidades de éxito en su adopción por parte del sector productivo.
Esta labor ha sido fundamental para abrir nuevas oportunidades de innovación en áreas clave como la industria alimentaria (en toda su cadena de valor), sustentabilidad y economía circular, salud, educación y ciencia de datos, aportando valor a las empresas y fortaleciendo el ecosistema de I+D+i en el país.
Hitos HUBTEC
Ignacio Merino, Director Ejecutivo de HUBTEC, destaca que uno de los principales retos que ha enfrentado el hub ha sido la madurez limitada del ecosistema de innovación en Chile.
“En el inicio de los hubs, esto dificultó la especialización, comercialización e internacionalización de las tecnologías”, comenta. “Sin embargo, este diagnóstico fue clave para que trabajáramos en un enfoque que abordara la etapa temprana de los proyectos tecnológicos, que es la brecha más relevante que impide que éstos lleguen a generar impacto al mercado y la sociedad en mayor escala”.
Durante sus siete años de gestión, HUBTEC ha trabajado de manera coordinada con diversos actores del sector, logrando los siguientes hitos:
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Evaluación de 467 proyectos de base científico-tecnológica, con apoyo directo a 74 iniciativas.
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Construcción de 91 hojas de ruta con visión de desarrollo a largo plazo.
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65 acuerdos de transferencia firmados entre los proyectos del portafolio, de los cuales 25 se encuentran actualmente en etapa de negociación.
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Levantamiento de $7.300 millones en inversión inducida, tanto pública como privada.
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En el ámbito de la propiedad intelectual, ha colaborado en la definición de 66 estrategias y en la solicitud de 38 patentes, gracias al trabajo de su equipo ejecutivo y una red de más de 500 expertos asesores y mentores.
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A la fecha, mantiene 22 proyectos vigentes en áreas como agroindustria, salud y bienestar, tecnología ambiental y sostenibilidad, educación y ciencia de datos.
Desafíos y oportunidades
Merino también menciona los desafíos más importantes en estos años. “En 2017, el World Economic Forum situaba a Chile en el puesto 33° como una de las economías más competitivas de la región. Sin embargo, existía una necesidad clara de transformar al país en una economía basada en el conocimiento, donde la innovación, la tecnología, la educación y el desarrollo desempeñaran un papel central en la creación de valor económico, superando factores tradicionales como los recursos naturales”.
Según reportes del Ministerio de Ciencia y Tecnología, el Programa de los hubs de Transferencia Tecnológica ha sido clave para mejorar el sistema chileno de transferencia. Sin embargo, aún es necesario fortalecer la colaboración entre diversos actores para lograr un mayor impacto.
“Es cierto que hemos avanzado, pero todavía queda mucho por hacer en cuanto a la vinculación entre el sector privado y el mundo académico, así como en impulsar el emprendimiento de base científico-tecnológica como motor de desarrollo. Desde HUBTEC seguiremos enfocados en esa meta. La ciencia, el conocimiento, la tecnología y la innovación juegan un rol fundamental en el crecimiento del país, y hoy Chile tiene una oportunidad única. Contamos con un sistema de ciencia y tecnología emergente y en proceso de maduración, con excelentes capacidades y talentos que pueden ofrecer soluciones exitosas a los desafíos que enfrentamos”, señala Merino.
HUBTEC 2017-2024
Creado bajo una política pública del Estado chileno para impulsar la transferencia de conocimiento y tecnología, el emprendimiento de base científico-tecnológica y la vinculación entre ciencia e industria, HUBTEC mantiene desde sus inicios un estrecho lazo con sus 7 universidades socias fundadoras: Pontificia Universidad Católica de Chile, Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, Universidad de Valparaíso, Universidad de La Frontera, Universidad Andrés Bello, Universidad del Desarrollo y Universidad de Los Andes.
Entre sus principales hitos, destaca la adopción de un modelo de transferencia de conocimiento y tecnología, que se ha convertido en la base estratégica para el diseño de sus programas de maduración y aceleración tecnológica, como GO! para la maduración y aceleración de tecnologías, GROW para la creación y aceleración de emprendimientos de base científico-tecnológica, y MATCH, que vincula las tecnologías y capacidades de I+D con las necesidades de la industria. Estos programas han permitido cubrir las brechas más importantes para la transferencia exitosa de proyectos, desde la concepción de la idea hasta su llegada y escalamiento en el mercado y la sociedad.