Tamara y Makarena Nilo: Las mujeres detrás de La Tablita Machalí

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El delivery de comida se ha ganado un espacio en el mercado, y cómo no, si para muchos representa una solución a la hora de comer rico y tan solo al alcance de una llamada telefónica. Pero esta tendencia va más allá de pedir pizza, sándwich o comida oriental, pues en la Región de O’Higgins nos encontramos con Tamara y Makarena Nilo Sepúlveda, dos hermanas que le están dando un nuevo sentido a su emprendimiento gastronómico, el que se distingue por sus ya famosas y reconocidas preparaciones sobre tablas de roble


Para conocer más sobre esta novedosa idea, Poder y Liderazgo conversó con estas dos emprendedoras, quienes dejaron sus profesiones y vidas tranquilas, para embarcarse en La Tablita Machalí, un negocio que combina sabor con nobles maderas.

Un cóctel en casa, con todo lo que ello implica, provoca en la mayoría de los casos un desgaste de tiempo y esfuerzos en los preparativos. Y ahí es donde La Tablita Machalí resuelve el problema, porque con un solo llamado, se puede recibir una tablita de esas ideales para compartir entre dos, pero si hay más invitados, no es problema, pues tienen para seis o para cien, y con todo lo que se pueda imaginar y degustar. Así de amplio y sabroso es este emprendimiento que llega servido en tablas rústicas y con mucho estilo.


Tamara, ¿Cuánto tiempo llevan con esta idea y cómo surge?

“Comenzamos en agosto del 2017 y surge por las ganas de tener un negocio propio e innovar con un servicio diferente. Junto a mi hermana en un inicio probamos con una tienda de artículos de decoración y bordado. Nos instalábamos en los distintos bazares generalmente en Rancagua y Machalí. Paralelamente, en los eventos familiares siempre tuvimos la habilidad de generar variedades de cócteles teniendo siempre una excelente recepción. En más de alguna ocasión pensamos en una empresa de banquetería, e hicimos en el 2016 todo el trámite en SII y sacamos facturas pero todo quedó “stand by” y no lo desarrollamos en su momento”.

“Yo tenía mi segundo hijo y mi hermana también.  Fue entonces cuando ya el año pasado pensamos en la idea de crear el servicio de cocktail a domicilio y nace La Tablita Machalí. La idea tiene su base  en las picadas argentinas y lo que es para nosotros un picoteo. Partimos con una tabla que es la que aparece en nuestro logo, pero con el tiempo y en especial con las fechas especiales, la demanda aumenta considerablemente”.

“El nombre básicamente nace porque desarrollaríamos nuestro negocio en la comuna de Machalí y también pensamos en el auge inmobiliario y su potencial en cuanto a calidad de vida de la comuna, entonces era un nicho donde queríamos apuntar sin dejar de lado Rancagua y alrededores”.


Makarena posee estudio de técnico agrícola; Tamara en administración de empresa, y ambas cuentan con más de  11 años de experiencia en el retail. ¿Fue difícil cambiar el switch? ¿Hay sacrificios para emprender un negocio de este tipo?

“Siempre es difícil cambiar el switch, y respecto a los sacrificios, generalmente van implícitos al crear un emprendimiento que prácticamente presta un servicio 24/7. Nuestros maridos e hijos son los que tienen el primer impacto, sobre todo los fines de semana cuando es mayor la demanda. Pero pasa por un tema de coordinación, hay momentos que nosotras estamos en el proceso de hacer varios pedidos y nuestros maridos van repartiendo, o yo reparto y mi hermana se queda haciendo tablas y viceversa. Por suerte contamos con el apoyo de toda la familia… muchas veces son los abuelos de nuestros hijos los que se quedan al cuidado y eso nos da la tranquilidad de que están siendo bien atendidos”.


Tamara, ¿crees que tu experiencia laboral es un plus para el negocio?

“Trabajé 11 años en retail siendo Jefa de la Tarjeta Cencosud en las sucursales de  Alto Las Condes, Bilbao y El Alba en Santiago  y Paris Rex  Rancagua.  Ahí tuve la posibilidad de tener un trato directo con clientes muy exigentes y comprender sus necesidades, esa experiencia la hemos llevado a La Tablita Machalí”.


Y para ti Makarena, ¿cómo ha sido esta experiencia?

“Al igual que mi hermana, yo también cuento con experiencia previa, pues trabajé 11 años en el área de servicio al cliente y cobranza de retail de Ripley, donde adquirí herramientas administrativas, en calidad en atención y en servicio al cliente.  Y todo ello me ha servido mucho hoy”.


¿Cómo llevan a la práctica y mezclan las ventas y la calidad del producto?

“La comunicación –dice Tamara Nilo- es muy importante con el cliente y asimismo entregar el mejor servicio detectando las necesidades que él tenga y así entrelazar la venta de mejor manera”.

“La idea es guiar al cliente para resolver sus necesidades.  Orientamos a nuestros clientes y resolvemos su problema a la hora de necesitar un cocktail. En el rubro gourmet la calidad de tus productos debe ser de primera para que el cliente quede con la sensación de una experiencia satisfactoria y nuevamente solicite el servicio. La clave es ir innovando cada día”.


Al ser un negocio familiar, ¿cuáles son los pro y los contra?

Básicamente los tiempos familiares y recreacionales son los contra y quizá la envidia del rubro, que no teníamos idea que pudiese existir.  Nosotros nos preocupamos de nosotros y dar el mejor servicio, suena redundante pero eso es así”, explica Makarena, agregando respecto a los pro del emprendimiento, que “sin duda ser empresa familiar es un plus. El suegro de mi hermana fabrica las tablas. Junto a mi Tamara estamos constantemente buscando nuevos sabores e innovando en la presentación. Mi esposo ve toda la imagen corporativa y redes sociales junto a un diseñador y mi cuñado nos asesora en temas comerciales y todos somos repartidores”.

“Ellos también tienen su profesiones –uno es periodista y comunicador audiovisual, y el otro ingeniero en administración de empresas- y se multiplican para ayudarnos los fines de semana”.


Y en el tema de la competencia, ¿cómo se paran frente a grandes cadenas?

“Nuestra idea –señala Tamara- es dar una alternativa paralela a lo que ofrecen las otras cadenas de comida delivery. Que los clientes tengan una experiencia en el servicio satisfactoria.  Por lo mismo tenemos proveedores que nos dan productos de primera calidad.  Esto hace fidelizar a nuestros clientes, los cuales vuelven a solicitar nuestro servicio en diferentes instancias, ya sea un evento familiar, un coffee break, un bautizo, etc.”.


¿Ven potencial en la región para masificar esta idea de negocio?

“Claramente nos hemos dado cuenta que es llamativa nuestra propuesta pero nada de fácil llevarla a cabo. Hemos conocido otras experiencias que tienen la misma premisa pero van quedando en el camino o finalmente se estancan”, explica Macarena Nilo.

De igual opinión e Tamara, quien destaca que “creemos que nuestro potencial va en diversificar nuestra marca y en eso estamos trabajando para siempre entregar nuevos productos y continuamente estar mejorando el servicio. Somos muy rigurosos en protocolo de atención, desde que se solicita la tabla, se entrega y la post venta. Siempre queremos conocer la apreciación de nuestros clientes con La Tablita Machalí”.


Tamara, ¿Cómo abordan el tema de imagen?, pues más allá de la calidad y profesionalismo en el negocio, también han invertido en un tema corporativo que los identifica.

“Para nosotros es clave la imagen, mi esposo, Pablo Miranda, tiene experiencia en el rubro de las comunicaciones, es periodista y comunicador audiovisual y su mirada estratégica en medios digitales y tradicionales ha sido una herramienta fundamental para que nuestra marca sea visibilizada sobre todo en redes sociales, es un actor clave en la difusión de la marca. La comunicación es un factor relevante para mantener ese importante feedback con nuestros clientes. Ya tenemos en facebook más de 5.500 seguidores”.

“Hemos tenido la posibilidad de contar con algunos rostros de tv que nos han entregado su apoyo en videos y fotos para nuestras redes sociales. También estuvimos en el estreno de CQC en Chilevisión. Asimismo, Nicolás Larraín y Christopher Carpentier han participado en nuestra difusión, y mucho más, como los jugadores del Club O’Higgins”, señala Tamara Nilo.


Y para ti Makarena, ¿qué crees diferencia a La Tablita Machalí de otros emprendimientos de este tipo?

“Nuestros factores de diferenciación están en dar una respuesta oportuna a las necesidades de nuestros clientes. Nos enfocamos en entregar variedad de productos y de la mejor calidad, y en el trato y puntualidad en la entrega junto con la innovación gourmet que aplicamos día a día”.


¿Han incursionado en la búsqueda de apoyos comerciales de instituciones de gobierno?

“Recientemente estamos incluidos en la plataforma de Mercado Regional de Corfo y ha sido una grata experiencia para compartir con emprendedores de otros rubros. Con ellos se abre un abanico de nuevos contactos y finalmente de nuevos negocios. Hay muchas ganas de innovar y eso se nota en la convocatoria y en los distintos productos que se ofrecen ahí”.


En esta misma línea, ¿Qué papel debe jugar el sector público a juicio de ustedes para apoyar los emprendimientos?

“Hasta ahora –explica Makarena- todo el financiamiento es familiar y eso conlleva costos de crecimiento que asumimos, pero ojalá llegue la instancia que el Estado apoye a los diferentes emprendedores. Estamos conscientes que son muchas las personas que quisieran apoyo en el financiamiento y seguir con sus negocios… a veces la buenas ideas quedan en ideas y no se concretan entonces el apoyo del sector público es vital para seguir adelante”.

“Por lo mismo estamos en la búsqueda de los diferentes financiamientos que entrega el sector público”.


El secreto del éxito

Para Makarena, “está implícito en nuestro sello personal, que sin duda ha sido un factor diferenciador al servicio de cocktelería tradicional”, mientras que para Tamara, está en “creer en tu ideas y llevarlas a cabo. Innovar constantemente en dar el mejor servicio a los clientes”.


Las Tablitas Machalí, un emprendimiento de dos jóvenes profesionales que se atrevieron a dar el paso, a decir “nosotras podemos” y a embarcar a sus familias en un proyecto que está ganándose un espacio en las mesas de sus clientes en la Región de O’Higgins y que ya está incursionando hasta otras zonas del país.

Son historias como la de Tamara y Makarena las que alientan a nuevos liderazgos a emprender sus proyectos en regiones y a enviar un claro mensaje… Atención, aquí vamos, pues llegamos para quedarnos y crecer!


 

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